Los Secretos, un grupo con más de tres décadas de trayectoria, ha vuelto hoy a comenzar una gira en Logroño, en la clausura del Festival Actual Impar y con el objetivo de presentar un espectáculo que recupera parte de su esencia acústica.
Así lo han explicado hoy sus integrantes en una conferencia de prensa en la que se han referido a su momento musical y a cómo ven el panorama cultural español.
Esta conferencia de prensa y el posterior concierto han sido las últimas actividades de Actual Impar, el primer festival de música que se celebra cada año en España y que en esta edición ha reunido a una decena de bandas de España y Portugal; también se han proyectado media docena de películas de estreno en nuestro país.
La gira de Los Secretos, denominada "En este mundo raro" y que arranca hoy, se caracteriza porque el grupo ha buscado "un punto intermedio entre el trío acústico que sonaba muy simple y la banda electrónica que era demasiado", ha explicado el cantante, Álvaro Urquijo.
Han sustituido la batería "por un cajón" y también incorporan guitarras y bajo acústicos además de un piano de cola para conseguir "un sonido en el que parece que no hay micrófonos", ha detallado otro de los miembros de la banda, Jesús Redondo.
"Cuando todo el mundo hacía conciertos acústicos, de esos que se llamaban desenchufados, nosotros decidimos dejarlo y ahora que ha pasado la moda nosotros lo recuperamos", ha añadido su compañero Ramón Arroyo.
En cualquier caso, ha afirmado Urquijo, "lo que importa del show es que mantenemos nuestros éxitos, esas canciones que son el equipaje de nuestra vida, temas que se sabe todo el mundo" y a ellas añaden algunas menos conocidas.
La gira que arranca hoy les llevará de un lado a otro del país en pocos meses: de Logroño a Pola de Siero (Asturias), Granada, Murcia, Barcelona, Huesca y Elche, de momento.
En ninguno de esos casos, y del resto de lugares donde les contraten, se plantean "imponer" el formato del concierto, porque consideran que hoy en día los artistas "deben saber adaptarse a tocar donde te llamen, en un polideportivo o en un teatro, en salas pequeñas o ante 20.000 personas, y el que no se adapte a eso no va a sobrevivir", han asegurado.
Ellos han comprobado que después de tres décadas en este oficio viven "un momento difícil" debido a que se habían "acostumbrado a lo bueno", porque "en realidad, a comienzos de los años ochenta sí que era difícil todo", ha afirmado Urquijo.
"No niego que hemos notado que hay menos poder adquisitivo en la calle. En 2008 llenábamos sitios con veinte mil personas y en 2011 ya tocábamos solo para 2.800 como mucho", ha reconocido.
Además, para la música "la crisis venía de antes, por el daño que han hecho internet y la piratería", ha dicho.
Sin embargo, ha recordado que en 1980, cuando de su primer disco se vendieron 11.000 copias y dieron 105 conciertos no tuvo dinero ni para comprarse un coche y no pudo independizarse de sus padres "hasta 1986", y no se quejaban de "ganar poco".
"Todo estaba peor entonces, pero la música era más respetada -ha continuado Urquijo-. Ahora, al venir de un tiempo de bonanza, lo llevamos peor, pero nosotros sí que podemos hablar de cómo eran las cosas hace treinta años".
En las últimas décadas "la avaricia y la codicia han influido mucho en la música" y ha recordado como a él y a su hermano Enrique (fallecido en 1999) les proponían hacer sólo dos buenas canciones por disco "porque decían que solo iban a sonar esas y que lo demás no importaba" y además "querían que una fuera de nuevo un éxito como 'Déjame'", en alusión a su primer "hit".
En este panorama ha recomendado a los artistas jóvenes "que olviden la parte de negocio que tiene la música, porque ya hemos visto lo fea que es" y que "se concentren en el proceso creativo y en mejorar".
De hecho, cree que una de las claves por las que Los Secretos ha sobrevivido treinta años es que han sido "cabezotas" con lo que querían hacer, "con intentar que todas las canciones fueran buenas" y "mientras, otros tenían cachés millonarios", ha ironizado.
Urquijo también ha apuntado que no cree que el nivel de creatividad de la música actual española sea similar al de sus inicios en la "movida madrileña", un movimiento "mal llamado".
"Ahora hay más diversidad y todo el mundo toca bien, pero el interés social se ha desviado de la música, la educación musical de todo el país ha empeorado y el respeto a este trabajo también y aunque haya más opciones, la música está desaparecida", ha criticado el vocalista de Los Secretos.