El Tribunal de Cuentas ha constatado que los ingresos consolidados de Aena, la empresa pública que gestiona los aeropuertos en España, se redujeron un 50,2% en 2020, hasta situarse en los 2.243 millones de euros. Se trata de una de las consecuencias de la pandemia, que además provocó una caída en el trafico de pasajeros del 72,4%.
Así lo recoge un informe del organismo, aprobado por el Pleno, en el que se tratan las medidas adoptadas por la empresa ante la disminución de la actividad aeroportuaria en 2020.
Asimismo, el informe explica además de la bajada del número de operaciones y la del tráfico de pasajeros, el descenso en la actividad de mercancías (-26,3%).
Entre los aeropuertos de la red de Aena, las caídas más importantes las sufrieron el de Madrid-Barajas (-72,2%), El Prat-Barcelona (-75,8%), Palma de Mallorca (-79,4%) y Málaga (-74%).
En cuanto al descenso en las operaciones de tráfico, se registraron mayores caídas en Madrid-Barajas (-61,1%), El Prat-Barcelona (-64,4%), Alicante-Elche (-63,4%) y Palma de Mallorca (-64,6%). Y, en el tráfico de mercancías, destacan Málaga (-70%), Tenerife Sur (-63%) y Lanzarote (-59%).
El documento también sostiene que la crisis sanitaria no tuvo un impacto relevante en la plantilla de Aena, ya que el personal vinculado a los servicios afectados por la disminución de la actividad no era personal propio de la compañía, sino que pertenecía a empresas externas.
El documento, apunta que Aena se encuentra "lejos de acreditar una igualdad efectiva en todos los segmentos de su plantilla" en términos de igualdad.