El presidente de la Confederación Empresarial de Madrid, Miguel Garrido, ha asegurado que la fijación de un tipo mínimo de tributación a grandes empresas tendrá un "efecto negativo" ya que devendrá en que "pierda su eficacia" la deducción fiscal por I+D+i.
Así lo ha asegurado en la inauguración de la Cumbre de Innovación que han organizado en la que ha asegurado que lo que hay que potenciar es "nuevas políticas de apoyo a la innovación".
En este sentido ha puesto como ejemplo la mejora de incentivos fiscales en este campo incrementando porcentajes de bonificación del impuesto de sociedades, ampliando su ámbito de aplicación y garantizando más seguridad jurídica.
Entiende que justo en este último aspecto debe reforzarse el marco de la innovación en propiedad intelectual e industrial y aprovechar la llegada de los Fondos ReactEU.
Garrido ha advertido sobre esta "oportunidad" que debería ahondarse en una mayor orientación empresarial porque las convocatorias "tienen hasta la fecha como destinatario fundamentalmente el sector público" y cree que deberían mejorarse las condiciones de presentación.
Para CEIM "urge" la necesidad de mejorar la capacidad de reacción de las instituciones públicas porque ve como una amenaza que en España a llegada de este dinero comunitario sea lenta frente a otros países, lo que puede implicar "riesgo de traslocación" de inversiones.
Considera que para mejorar el impacto de las políticas públicas sobre la actividad innovadora de las empresas se debe mejorar la coordinación y la normativa en los tres niveles --estatal, autonómica y local-- para que, entre otras cuestiones, "no entren en conflicto".
Asimismo, ha puesto en valor las oportunidades que dota la tendencia global hacia una economía circular y descarbonizada, que abre ventanas tanto en grandes como en pequeñas empresas, pero ha recalcado que hay aspectos en los que queda "un largo camino por recorrer" y ha puesto como ejemplo la igualdad de género, ya que solos un 13% de investigadoras lideran proyectos competitivos.