El FMI salva a España de la posible recesión de las principales economías europeas
Alemania, por su dependencia gasista de Rusia, la más perjudicada
Polonia se está dejando una parte importante de su PIB en el acogimiento a los refugiados
EFE
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ve difícil que varias economías europeas, empezando por Alemania, puedan esquivar la recesión en la actual coyuntura, aunque dicha recesión sea "suave", al mismo tiempo que considera imprescindible que la región acelere las medidas para reducir su dependencia energética de Rusia.
El director del Fondo para Europa, Alfred Krammer, explicó este viernes que las grandes economías del continente, a excepción de España, están en el entorno de crecimiento "cero" y pueden entrar en recesión técnica, aunque sea "suave".
El FMI publicó este viernes su informe sobre coyuntura y perspectivas en Europa, que apunta a una previsión de crecimiento de las economías avanzadas de la región del 3% (un punto menos que lo que calculó en enero) y del 3,2 en el caso de las emergentes (1,5 puntos menos).
En este cálculo el Fondo no cuenta a Rusia, Bielorrusia ni Ucrania -cuyas caídas de crecimiento son mucho mayores a causa del conflicto- ni tampoco incluye a Turquía.
Durante la rueda de prensa de presentación de este informe, el director del Fondo para Europa, Alfred Krammer, advirtió de que las grandes economías del continente ya no están creciendo y dijo que la que más riesgo de recesión corre, aunque sea "suave" es la primera economía de la región, Alemania, tanto por su dependencia energética rusa como por los problemas que está teniendo en las cadenas de suministro.
El informe, por otro lado, dibuja distintos escenarios en caso de que la guerra de Ucrania se prolongue, y hace una estimación de lo que podría pasar si Rusia corta el suministro de gas: si dicho corte dura seis meses será soportable, pero si se prolonga un año la caída media del PIB en la región puede ser del 3%, con intervalos por países que irían del 1% al 6%, en este último caso en Alemania.
De ahí la necesidad apuntada por Krammer y repetida a lo largo del informe de que Europa acelere las medidas para reducir su dependencia energética rusa buscando otros suministros de gas -como el licuado- y apostando por las energías renovables.
"Tensiones sociales"
El informe del FMI alerta por otra parte del riesgo de "tensiones sociales" en Europa ante la fuerte subida de los precios energéticos y alimentarios en la región, y cree que el mayor peligro se da en los lugares con mayor acogida de refugiadosucranianos.
La salida de Ucrania de cinco millones de refugiados es una catástrofe humanitaria que según el Fondo Europa tiene que abordar de forma conjunta, y así señala que la UE tiene que "compartir los costes" de la acogida de refugiados que soportan unos pocos países.
Sobre todo Polonia, que se está gastando, dijo Krammer, entre medio punto y un punto de su Producto Interior Bruto (PIB) en la atención a los refugiados.
El informe considera que a corto plazo habrá que poner en marcha programas de ayudas para acoger a los refugiados, y planes económicos que se adapten a su llegada, como incentivos a la contratación de ucranianos que han tenido que huir de su país.
Pandemia versus Guerra
Y es que el informe deja claro que la guerra de Ucrania debe llevar a la región a replantearse buena parte de sus políticas de gasto, hasta ahora centradas en aplacar los efectos de la pandemia, y centrarse en las consecuencias que ya está teniendo el citado conflicto.
La guerra ha "eclipsado" la aún "incompleta" salida de la pandemia en Europa, dice el Fondo, que advierte de que la subida de precios de la energía y los alimentos causará "estragos" en la demanda, alterará los flujos comerciales y "exacerbará" los cuellos de botella de las cadenas de suministro.
Con este panorama, el informe avisa a los países europeos que deben abordar nuevos retos y pensar en nuevas medidas. En el plano fiscal, apuesta porque los estabilizadores automáticos -las partidas presupuestarias que se ven alteradas por los cambios en la actividad, como las destinadas a prestaciones por desempleo- "operen libremente" mientras que haya un replanteamiento de los programas de ayuda.
Ojo al reducir la compra de activos
Todo en un contexto de fuerte incertidumbre en el que según el FMI también los bancos centrales, especialmente el Banco Central Europeo, deben estar pendientes no sólo de la elevada inflación, sino también de la evolución económica para tener maniobras de respuesta.
El informe, en concreto, subraya que el Banco Central Europeo debe manejar con cuidado la reducción de compra de activos para evitar sustos.
Alfred Krammer apuntó que el BCE debe continuar con la "normalización" de la política monetaria aunque siempre pendiente de los datos, desde la evolución económica a la presión que la coyuntura ejerza sobre los precios.