El Gobierno no ha incluido ninguna referencia a la introducción del sistema de peajes en autovías comprometido con Bruselas para su puesta en marcha en 2024 en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023, a la espera de consensuar el mejor modelo con los transportistas y el resto de administraciones públicas.
En una rueda de prensa para presentar las principales cuentas públicas relativas al transporte y la vivienda --que concentran la mayor parte de las inversiones del Estado-, la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha confirmado que en los Presupuestos del próximo año no hay ninguna previsión respecto a los peajes.
"No hay ninguna previsión, estamos analizando las alternativas, que es lo que recoge la Ley de Movilidad Sostenible. La adopción de esa medida requiere de un consenso necesario con las comunidades autónomas y con los agentes que trabajan e intervienen en la carretera, siendo necesario que el momento social y económico sea el propicio", ha declarado la ministra.
Por el momento, el Ministerio que dirige Raquel Sánchez recibirá el próximo año 1.040 millones de euros para las actuaciones en carreteras, Seittsa percibirá 102 millones y la conservación de las vías aglutinará otros 1.150 millones de euros. En total, la inversión en carreteras será de 2.292 millones, un 0,5% menos que hace un año.
En el ámbito ferroviario, Sánchez ha anunciado que el Gobierno declarará obligación de servicio público para pasajeros recurrentes las relaciones ferroviarias incluidas en las bonificaciones que se aplican desde septiembre y que no lo eran aún.
También ha informado sobre nuevas soluciones en estudio para capitales de provincia sin trenes de alta velocidad, como la que se probará entre Soria y Calatayud, donde se dará la posibilidad de adquirir en un único billetes la combinación de tren de alta velocidad más el transporte por carretera.
En total, el presupuesto del próximo año para el Ministerio de Transportes ascenderá a 21.000 millones de euros, con una inversión directa de 16.550, distribuidos principalmente en 12.635 millones en Infraestructuras y en 3.472 millones para Vivienda.
La ministra ha defendido que, con estas cifras, estos Presupuestos se convierten en los más ambiciosos de los últimos 13 años, con un incremento del 64% respecto a la media del periodo del anterior Gobierno del PP.
"Se trata de unos Presupuestos progresistas para cambiar España, los más sostenibles, sociales y ambiciosos de los últimos 13 años. Esperamos generar 310.000 empleos con estas inversiones, que en un 60% tienen etiqueta verde", ha concluido.