El presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), Jerome Powell, consideró este miércoles que los tipos de interés han llegado a su pico este ciclo de política monetaria restrictiva y que en algún momento de este año será apropiado comenzar a bajarlos si la economía evoluciona favorablemente.
Powell se pronunció después de que los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en inglés), órgano encargado de decidir si se suben o no los tipos, decidiera por quinta vez consecutiva mantenerlos en la horquilla actual del 5,25 % al 5,5 %, su máximo nivel desde 2001.
"Creemos que nuestra tasa probablemente esté en su punto máximo para este ciclo de ajuste y que si la economía evoluciona en términos generales, tal como se espera, probablemente será apropiado comenzar a reducir la moderación en algún momento de este año", indicó en una conferencia de prensa.
El FOMC consideró hoy que al cierre del año los tipos de interés se moverán en una horquilla mediana tres cuartos de punto por debajo de la tasa actual, con lo que la Fed ejecutaría tres bajadas de tipo a lo largo de 2024.
El representante del regulador estadounidense subrayó que las decisiones se tomarán "reunión a reunión", pero dejó claro que no ven apropiado un descenso hasta que haya una mayor confianza en que la inflación avanza de forma sólida hasta el objetivo del 2%.
El índice de precios al consumo (IPC) subió al 3,2 % en febrero a nivel interanual, mientras que respecto al mes anterior aumentó un 0,4 %, por encima de lo esperado por los analistas y muy lejos de la meta del 2%.
"Mis colegas y yo somos muy conscientes de que una inflación elevada impone dificultades importantes, ya que erosiona el poder adquisitivo", dijo Powell, quien también recordó que es importante acertar en el momento elegido para la primera bajada de tipos de este año, ya que una decisión tardía afectará a la mejora del mercado laboral y el pleno empleo.
Se está en una situación, añadió, en que si se relaja la política de tipos demasiado o demasiado pronto la inflación podría subir, y si se hace demasiado tarde se pueden causar "daños innecesarios al empleo", por lo que el presidente de la Fed insistió en que su organismo quiere "tener cuidado".