La oficina estadística de la UE, Eurostat, ha revisado este lunes al alza hasta el 9,4% del PIB -en lugar del 8,5% previamente estimado- el déficit público de España el año pasado. La corrección se produce tras contabilizar las ayudas a Catalunya Caixa, Novagalicia y Unnim y facturas impagadas del Gobierno central, comunidades autónomas y ayuntamientos. Eurostat eleva además el déficit de 2010 del 9,3% al 9,7% por las facturas impagadas previamente no contabilizadas.
Con las nuevas cifras, sólo Irlanda registró en 2011 un déficit superior al español (13,4%), mientras que Grecia se sitúa al mismo nivel (9,4%). De media, el déficit ascendió en 2011 en la eurozona al 4,1% (frente al 6,2% en 2010) y en el conjunto de la UE al 4,4% (frente al 6,5%). Un total de 17 Estados miembros superan el límite del 3% que fija el Pacto de Estabilidad.
La revisión de 2011 ya fue anunciada a finales de septiembre por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que pronosticó que con estos datos el déficit quedará este año en el 7,4% (en lugar del 6,3% pactado por la UE). No obstante, la corrección por las ayudas a la banca no computa para el procedimiento sancionador por déficit excesivo. "El incremento en el déficit de 2011 se debe principalmente a la reclasificación de inyecciones de capital por parte del Gobierno central en Catalunya Caixa Bank, NCG Bank y Unnim Bank y a las facturas impagadas y no registradas previamente en los subsectores gubernamentales estatal y locales", señala el informe de Eurostat.
La UE también revisa al alza la deuda pública hasta el 69,3% en 2011 (en lugar del 68,5% previamente estimado) y el 61,5% en 2010 (en lugar del 61,2%). No obstante, en este capítulo España todavía sigue por debajo de la media de la UE (82,5%) y de la eurozona (87,3%) y de países como Alemania (80,5%) o Francia (86%).
Los países con mayor nivel de deuda pública en 2011 fueron Grecia (170,6% del PIB), Italia (120,7%), Portugal (108,1%), Irlanda (106,4%) y Bélgica (97,8%). En el extremo contrario se sitúan Estonia (6,1%), Bulgaria (16,3%), Luxemburgo (18,3%), Rumanía (33,4%), Suecia (38,4%) y Lituania (38,5%).
En 2011, el nivel de gasto público en la eurozona se situó en el 49,5% del PIB y el de ingresos públicos en el 45,4%. En España, estas cifras fueron, respectivamente, del 45,2% y del 35,7%.