Cientos de migrantes perdieron la vida este miércoles tras hundirse un pesquero en el que viajaban entre 400 y 700 de personas, en el Mar Jónico, ante la costa griega, confirmó a EFE una portavoz de la Guardia Costera helena, quien advirtió de que "probablemente aumentará más el número de fallecidos".
Hasta el momento han podido ser rescatadas con vida 104 personas procedentes de Pakistán, Egipto, Siria y Palestina cuatro de los cuales han sido trasladados con hipotermia en helicóptero al hospital de la ciudad de Kalamata.
Según los medios locales al menos 400 migrantes estaban a bordo de la embarcación, una cifra que no se confirma hasta el momento por parte de la Guardia Costera, y que puede ascender a 700.
Según la portavoz, el número de las personas que viajaban en el pesquero de 30 metros de eslora se sabrá cuando los supervivientes den sus primeros testimonios sobre lo ocurrido.
Diez embarcaciones, una fragata de la Armada, un helicóptero y un dron de FRONTEX, la agencia de fronteras de la Unión Europea, participan en las operaciones de búsqueda y rescate.
La embarcación partió desde el este de Libia y tenía como destino final Italia, informaron las autoridades. El pesquero había sido localizado ayer martes navegando en aguas internacionales al sur del Peloponeso, según la Guardia Costera.
Mientras, al sur de la isla de Creta los guardacostas lograron rescatar esta mañana a otros 80 migrantes que iban en un velero a la deriva. El pasado domingo las autoridades griegas rescataron al sur del Peloponeso a 90 migrantes que estaban a bordo de un yate que se encontraba a la deriva.
Las redes de traficantes de personas llevan años utilizando embarcaciones grandes, como veleros y pesqueros, para dirigirse desde Turquía o Libia al sur de la Italia continental, donde los migrantes y refugiados tienen un acceso más fácil a los países de Europa Central.