Venezuela vive un ambiente de crispación horas antes de que este martes se constituya el nuevo Parlamento, de mayoría opositora, que verá reducidas algunas de sus facultades con respecto al Banco Central del país (BCV) tras conocerse hoy una reforma de la ley de esa institución.
El nuevo presidente de la Asamblea Nacional (AN), Henry Ramos Allup, elegido este domingo por los 112 diputados opositores elegidos el 6 de diciembre, intentó hoy sin éxito entrar en la
sede de las comisiones parlamentarias después de que un vigilante del lugar se lo impidiera.
El diputado dijo que quiso pedir un balance de sus ahorros de sus gestiones pasadas como parlamentario y un "autodenominado esbirro" que cuidaba la puerta del Parlamento le dijo que no podía entrar por lo que decidió marcharse "con mucha prudencia, con mucha serenidad".
En el lugar y cuando decidió marcharse, Ramos Allup fue insultado por personas que identificaron como chavistas, que golpearon el vehículo al que se subió el diputado para abandonar la zona.
El grupo de chavistas dijo, además, que permanecerían en vigilia en la zona en la que se encuentran los edificios parlamentarios para estar en el sitio este martes cuando lleguen al lugar los diputados electos que tomarán posesión de sus cargos.
Ramos Allup insistió en que acudirán a la constitución los 112 diputados electos pese a la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de suspender la proclamación de tres de sus legisladores y de uno chavista, al tiempo que señaló que la máxima corte es un organismo "carente de legitimidad de origen".
Con anterioridad, Ramos Allup dijo durante una entrevista que la investigación parlamentaria sobre robos y despilfarros de dinero público por el Gobierno de Nicolás Maduro será "de dimensiones verdaderamente colosales".
Todo ello ocurre mientras el mismo Ramos Allup y líderes de la electa bancada chavista reiteraran la invitación a sus simpatizantes para acompañar a sus legisladores al acto de constitución de la nueva Asamblea Nacional.
La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) invitó a sus votantes a caminar junto a sus diputados durante varias calles hasta la sede del hemiciclo de sesiones, y pidió izar la bandera de Venezuela en las viviendas desde esta noche pues, dijo, se trata de "un día de fiesta".
Por su parte, los diputados chavistas electos invitaron este lunes a sus simpatizantes a acompañarlos al mismo acto, y prometer que esta bancada defenderá "las conquistas" de la llamada "revolución bolivariana".
Maduro pidió a los chavistas acudir en paz a acompañar a sus diputados y "sin caer en provocaciones", al tiempo que manifestó su deseo de que la nueva Asamblea le apoye en el lanzamiento de un decreto de "emergencia nacional" para abordar los "grandes temas de la economía", un anuncio que hará en los "próximos días".
El presidente dijo que con este decreto, que ya tiene listo, pretende "levantar uno por uno los elementos fundamentales de la producción, la distribución, la comercialización, la regulación de precios".
"Le pido apoyo al pueblo para que la Asamblea, primero, no me sabotee los recursos (...) y, segundo, me facilite los caminos para el plan de recuperación económica", dijo, y comentó que próximamente también anunciará la conformación de la nueva estructura de su "gabinete económico".
En esa misma alocución que ofreció desde el palacio presidencial de Miraflores el gobernante salió al paso a las manifestaciones de preocupación del Departamento de Estado de EE.UU. sobre el nuevo Parlamento y señaló que ese país no tiene que "meterse" en los asuntos "que son de los venezolanos".
Asimismo, este lunes se conoció una reforma de la Ley del Banco Central de Venezuela (BCV), promulgada por Maduro, en la que se suprime la facultad que tenía el parlamento de elegir al directorio de la institución y se puede "suspender de manera transitoria la publicación de información" por parte de este organismo.
En la reforma se suprime la obligación que establecía que la designación del presidente debía ser ratificado por el voto de la mayoría de los miembros de la AN y ahora será designado por el presidente para un período de siete años.
Mientras tanto, el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino, advirtió de que la Fuerza Armada no servirá para "desconocer" las instituciones democráticas, y pidió excluirla de la "diatriba" política en la que está inmerso el país a propósito de la investidura de los nuevos parlamentarios.