El Consejo Constitucional francés ha rechazado una nueva solicitud para que la reforma de las pensiones que eleva la edad mínima de jubilación de los 62 a los 64 años sea sometida a un referéndum, como había propuesto la izquierda. Se trata de otro revés legal para los opositores a esta controvertida reforma.
El pasado 14 de abril la máxima corte administrativa ya negó una primera solicitud de consulta y dio luz verde al grueso de la controvertida ley, lo que permitió al presidente francés, Emmanuel Macron, promulgarla para que entre en vigor el próximo 1 de septiembre.
Los sindicatos continúan con su ola de protestas y manifestaciones desde que se declaró la reforma de las pensiones por el Gobierno de Emmanuel Macron.
Los sindicatos afirman haber sacado a 2,3 millones de personas a la calle en las 300 manifestaciones convocadas el lunes por todo el país (el Gobierno estimó que fueron 782.000) e insisten en que, desde que comenzaron las protestas el 19 de enero, "se han batido récords tanto en el número de manifestantes como en el número de huelguistas".