El destituido comandante militar boliviano Juan José Zuñiga, acusado de un "intento de golpe de Estado" contra el Gobierno de Bolivia, afirmó en el momento en que era capturado que el presidente Luis Arce le ordenó sacar los "blindados" para "levantar" su popularidad.
"Hablaré con detalles el día domingo, en el colegio La Salle me reuní con el presidente (Luis Arce) y el presidente me dijo que la situación está muy jodida, que esta semana sería crítica y es necesario algo para levantar mi popularidad", dijo Zuñiga durante su captura.
Zuñiga afirmó que el presidente Arce le habría pedido realizar un movimiento militar. "Yo le pregunté: ¿sacamos los blindados? y él (Arce)" respondió "sacá", agregó. El destituido jefe militar dio una lista de los vehículos que supuestamente Arce le ordenó mover. "En la noche empiezan a bajar seis cascabeles y 6 urutús, más 14 zetas del regimiento de Achacachi", mencionó.
Zuñiga fue detenido y trasladado a una celda en la sede de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen, mientras que la Fiscalía anunció una "investigación penal" en contra suya y los militares que irrumpieron en la Casa Grande del Pueblo, sede del Gobierno.
Antes de relevar a toda la Cúpula de las Fuerzas Armadas, Arce encaró a Zuñiga en la puerta de la Casa Grande del Pueblo, sede del Gobierno, y que fue tumbada por un tanque militar, y le ordenó "replegar" a los militares que lo acompañaban.
"Repliegue todas estas fuerzas, es una orden", le gritó Luis Arce a Zuñiga.
Arce agradece a Bolivia y a la comunidad internacional
El presidente de Bolivia, Luis Arce, agradeció este miércoles en la noche al pueblo boliviano y a la comunidad internacional por su rechazo a la "intentona golpista" en contra de su Gobierno y reiteró la defensa a la democracia del país.
"Saludamos y expresamos nuestro más sincero agradecimiento a nuestras organizaciones sociales y a todo el pueblo boliviano, que salieron a las calles y se expresaron a través de distintos medios de comunicación, manifestando su rechazo a la intentona golpista, que lo único que hace es dañar la imagen de la democracia boliviana a nivel internacional y generar incertidumbre innecesaria en momentos en los que las y los bolivianos necesitamos trabajar para sacar adelante al país", expresó en sus redes sociales.
Este miércoles en la tarde, el temor se apoderó de los bolivianos después de que tanques y militares fuertemente armados irrumpieron en la sede del Gobierno de Bolivia bajo el mando de Juan José Zuñiga, quien en ese momento era el comandante del Ejército.
Cuando los primeros soldados arribaron a la Plaza Murillo, donde quedan las sedes del Ejecutivo y el Legislativo boliviano, Arce denunció "movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano".
Los militares fuertemente armados se tomaron toda la plaza y llegaron hasta el portón del Palacio de Gobierno y lo tumbaron con un tanque de guerra, momentos después Arce salió, custodiado por sus ministros, y encaró a Zuñiga y le ordenó el repliegue de las tropas a lo que finalmente accedió.
"¡Vamos a defender la democracia y la voluntad del pueblo boliviano cueste lo que cueste!", reiteró esta noche como ya lo había señalado momentos antes ante cientos de personas.
Luego de la retirada de los militares alzados en armas, Arce salió al balcón del Palacio Presidencial junto a su Gabinete y ante trabajadores estatales y seguidores defendió a su Gobierno "democráticamente elegido en las urnas".