La decisión del Gobierno de repatriar a los cooperantes españoles de los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf respondía a una información recabada sobre la existencia de un plan "inminente" de secuestrar a algunos de estos compatriotas, ha revelado este lunes el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha asegurado hoy que el Gobierno tenía información de que iba a haber un secuestro "inminente" de cooperantes en los campamentos saharauis, por lo que se tomó la decisión de repatriarlos de forma "voluntaria". "Puedo garantizar que sabíamos que se iba a producir este secuestro. Los indicios que tenemos son ciertos e inminentes", ha afirmado el ministro al ser preguntado por las quejas de los colectivos prosaharauis ante la decisión del Ejecutivo de evacuarlos de la zona sin darles explicaciones.
El titular de Exteriores ha hecho estas declaraciones a los periodistas en el Palacio de Santa Cruz tras firmar un acuerdo de colaboración con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo. García-Margallo ha hecho hincapié en que los datos recabados de los servicios de inteligencia españoles y de otros países apuntaban a un rapto a cargo de grupos terroristas procedentes del norte de Mali, similar al que sufrieron durante nueve meses los cooperantes Enric Gonyalons y Ainhoa Fernández en los campamentos de Tinduf (Argelia).
"La obligación del Gobierno es garantizar la seguridad de los ciudadanos dentro y fuera de España", ha aseverado. "Cuando hemos tenido indicios racionales de que se planeaba un secuestro de cooperantes españolas en los campamentos de Tinduf (Argelia), verificado hasta la extenuación que esta operación era inminente, lo que hemos hecho es alertar del riesgo y ofrecer a los cooperantes que estaban, como era nuestra obligación, la repatriación", ha añadido.
Tras remarcar que la evacuación de los 15 cooperantes llevada a cabo este fin de semana fue "voluntaria", ha expresado su deseo de que esta retirada sea "exclusivamente temporal".
Sobre el anuncio de que una veintena de voluntarios viajarán la próxima semana al Sáhara contraviniendo el consejo del Exteriores, el ministro les ha advertido: "Pueden volver si quieren, pero tienen que saber que cualquier cosa que les pase les afectaré a ellos y a todos los españoles".
García-Margallo ha recordado que desde 2007 ha habido catorce españoles secuestrados en África, sin contar con los de los pesqueros en aguas de Somalia.
Ha apuntado igualmente que hay dos cooperantes de Médicos Sin Fronteras, Blanca Thiebaut y Montserrat Serra, que siguen en cautiverio en Somalia desde que fueron apresadas el pasado mes de octubre.
El ministro ha explicado que a pesar de la salida de los cooperantes de los campamentos de Tinduf, el Gobierno mantiene su voluntad de seguir colaborando con los saharauis. "El compromiso con el pueblo saharaui es el mismo que hemos tenido siempre", ha subrayado el ministro, tras recordar que España sigue siendo el primer donante de ayuda.
Consciente de las dificultades que padecen los refugiados desde el punto de vista humanitario, García-Margallo ha señalado que se están buscando fórmulas para atender sus necesidades.
RUBALCABA: NO TENEMOS NADA QUE DECIR
Por su parte, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, preguntado al respecto ha señalado que la repatriación de los cooperantes españoles de los campamentos saharauis se ha hecho por su propia seguridad. "La seguridad de los cooperantes es responsabilidad del Gobierno y la decisión que ha tomado, la ha tomado en función de esa responsabilidad", ha manifestado este lunes en Santander el dirigente socialista, para indicar que el Ejecutivo de Mariano Rajoy les ha informado de esta decisión. "Nosotros -ha apuntado- no tenemos nada que decir".