La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata, Kamala Harris, aventaja por cinco puntos en intención de voto nacional a su rival republicano, el expresidente Donald Trump, según una encuesta realizada tras el debate televisado del pasado martes.
El sondeo, elaborado por la empresa Ipsos para la agencia Reuters, arroja una intención de voto para la aspirante demócrata del 47% frente al 42% del republicano, con un margen de error de tres puntos porcentuales.
La diferencia entre ambos aumentó un punto, hasta los cinco puntos, respecto a la última encuesta de Ipsos que se hizo a finales de agosto.
El nuevo sondeo, que tuvo una muestra de 1.690 personas, se llevó a cabo entre los días 11 y 12 de septiembre, después del debate del 10 de septiembre que enfrentó a Harris y a Trump en Filadelfia (Pensilvania).
En ese cara a cara, emitido por la cadena ABC, la demócrata se mostró sosegada y presidenciable frente un republicano irritado y a la defensiva que fue corregido varias veces por los moderadores para desmentir algunos de sus noticias falsas.
El 52% de los encuestados por Ipsos considera que Harris ganó el debate, mientras que solo el 21% cree que Trump tuvo un mejor desempeño.
La campaña demócrata ha pedido celebrar otro cara a cara antes de las presidenciales del 5 de noviembre, pero Trump descartó el jueves volver a debatir con su oponente.
Debido al sistema electoral estadounidense, los comicios se decidirán en un puñado de estados decisivos donde las encuestas reflejan una competencia muy reñida entre ambos candidatos.
Biden denuncia los ataques a la comunidad haitiana
Tras las acusaciones vertidas por Donald Trump durante el debate, en las que acusaba falsamente a los emigrantes haitianos de comer las mascotas de los estadounidenses, el presidente estadounidense, Joe Biden, pidió al expresidente que frene en sus ataques a esta comunidad.
"La comunidad haitiana estadounidense está bajo ataque en nuestro país en este momento. Es incorrecto. No hay lugar (para eso) en Estados Unidos. Lo que está haciendo tiene que parar, ¡tiene que parar!", dijo sin citar directamente a su antecesor.
Trump lleva días expandiendo el bulo de que los haitianos se comen a los gatos y a los perros de los ciudadanos de sus lugares de residencia.
El magnate republicano ha insistido en esa retórica sin pruebas en mítines de campaña e incluso en el debate.
"Muchas ciudades no quieren hablar de ello porque les da vergüenza. En Springfield (Ohio) la gente que vino se está comiendo a los perros, se está comiendo a los gatos, se está comiendo a las mascotas de la gente que vive allí y esto es lo que está pasando en nuestro país y es una vergüenza", apuntó en ese cara a cara electoral.
Este jueves, en un mitin en Tucson (Arizona), añadió que incluso se comían a los gansos de los lagos de los parques.
La Casa Blanca había expresado ya su preocupación sobre el peligro que puede suponer para comunidades migrantes como la haitiana la difusión de esas noticias falsas por parte del exmandatario y otros republicanos radicales.
El Ejecutivo haitiano ha intervenido en un intento por poner fin a la situación. El miércoles, el Ministerio de los Haitianos Residentes en el Extranjero (MHVE) expresó su solidaridad con sus nacionales y mandó "una señal clara de rechazo" al respecto.
Trump asegura que su plan de deportación comenzará en Springfield
Lejos de retirar sus acusaciones, Donald Trump aseguró que de ser elegido como presidente su plan de llevar a cabo la "mayor deportación (de inmigrantes) de la historia del país" comenzará en Springfield (Ohio) con destino a Venezuela.
"Esto es lo que puede decir: haremos deportaciones en masa desde Springfield. Vamos a sacar a esa gente. La vamos a llevar de vuelta a Venezuela", espetó en una rueda de prensa ofrecida en su club de golf en Palos Verdes, California.
En su opinión, los "hatianos ilegales" están destruyendo el modo de vida de los habitantes de esa zona.
El exmandatario usó gran parte de su conferencia de prensa para criticar además a su contrincante el 5 de noviembre, la vicepresidenta y aspirante demócrata, Kamala Harris, acusándola de nuevo sin pruebas de facilitar la "mayor ola de tráfico sexual y trata de personas de la historia" con sus políticas en la frontera con México.
Trump consideró a Harris responsable del deterioro de la ley y el orden en California a través de sus políticas como fiscal general en ese estado (2011-2017) y como senadora del mismo (2017-2021).