Los vecinos de Kiev siguen conmocionados por los bombardeos sufridos por la ciudad hace 24 horas. Muchos se acogen a la religión y se refugian en las iglesias. “La gente está aterrorizada, dice el padre Yuri Vaskiv, es casi imposible darles consuelo”.
Valentyna Yuta, desplazada desde la ciudad de Dimerka, dice: “Mi madre aún no se cree que no tenemos un lugar al que volver”. Muchos se acogen a la religión y se refugian en las iglesias.
“La gente está aterrorizada, dice el padre Yuri Vaskiv, es casi imposible darles consuelo”. Valentyna Yuta, desplazada desde la ciudad de Dimerka, dice: “Mi madre aún no se cree que no tenemos un lugar al que volver”.
Un almacén de combustible y unas instalaciones militares en las afueras de la capital han sido destruida por las explosiones. “No ha habido razón militar alguna para el bombardeo”, dice Yaroslav, al que una explosión ha destruido su casa.
Mariupol sufre miles de víctimas civiles, y el 90% de sus edificios dañados. Pero no ha caído. “Los rusos, dice su alcalde Vadim Boichenko, quieren borrarnos de la faz de la tierra. Es un genocidio” Según la ONU, desde el comienzo de la guerra han muerto 1.119 civiles y 1.790 han resultado heridos, una cifra que aumentará mucho a medida que se tenga más información desde los puntos más calientes.
Una diputada ucraniana ha denunciado que los soldados rusos han perpetrado numerosas violaciones.
El presidente francés, Macron, se ha desmarcado hoy de su homólogo Biden, que ayer llamó carnicero a Putin y del que dijo no puede permanecer en el poder “Yo no hubiera utilizado esas palabras, dice, hay que hacer todo para evitar una escalada del conflicto”.
El Papa ha hecho un nuevo llamamiento por la paz. “La guerra, dice, es un acto bárbaro que debe ser abolido”. Y Ucrania resiste. Cantantes de la Ópera de Odessa dedican a sus vecinos temas tradicionales. “Intentamos, dice Andri Harlamov, levantar el ánimo con la música”. Lo hacen en la estación de tren desdela gente huye de la ciudad.
Por otra parte, siempre hay motivos para la esperanza: Rusia y Ucrania volverán a sentarse a negociar desde este lunes en Turquía. Serán tres días cara a cara, en busca del fin de una guerra que está asolando el este europeo.