La ONU se prepara para enviar inspectores a dos instalaciones nucleares ucranianas como reacción a las afirmaciones rusas de que Kiev podría desplegar una "bomba sucia". "El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) es consciente de declaraciones hechas por la Federación Rusa el domingo sobre supuestas actividades en dos instalaciones nucleares en Ucrania", ha dicho la OIEA un comunicado, y agregó que ambos ya estaban sujetos a sus inspecciones y uno fue inspeccionado hace un mes.
Ucrania desmintió de inmediato las acusaciones provenientes del Kremlin. Su ministro de Defensa, Oleksii Reznikov, afirmaba este mismo lunes que "a diferencia de Moscú, Ucrania siempre ha sido extremadamente responsable en cuestiones de seguridad nuclear".
"Todas nuestras instalaciones nucleares están abiertas al OIEA. Es fácil confirmar que las declaraciones rusas son un disparate", dijo.
Por su parte, el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, dijo haber hablado con el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, y que ambos coincidieron en que "la campaña de desinformación de Rusia sobre la 'bomba sucia' podría tener como objetivo crear un pretexto para una operación de falsa bandera".