La Misión de Investigación de la ONU para Siria intervino hoy en el Consejo de Derechos Humanos para informar sobre la situación de las libertades fundamentales del país, cuyos ciudadanos, aseguró, "se sienten abandonados y traicionados" por la escasa ayuda recibida tras los sismos del 6 de febrero.
"La comunidad internacional respondió a la ayuda solicitada inmediatamente por Turquía en forma de operativos de rescate y equipamiento, pero falló estrepitosamente en Siria", afirmó en su intervención ante el órgano de Naciones Unidas el brasileño Paulo Pinheiro, presidente de la comisión.
Al olvido de la comunidad internacional, señaló, se añadieron los obstáculos que tanto el Gobierno sirio como otras partes del conflicto pusieron a la entrada de ayuda humanitaria a la principal zona del país afectada por los terremotos, el noroeste, donde al menos fallecieron 4.500 personas.
"El Gobierno sirio retrasó la concesión de permisos para la entrada de ayuda transfronteriza al noroeste en la primera semana, un momento clave, y obstaculizó la llegada de asistencia", subrayó.
También dificultaron la llegada de esa ayuda tanto los rebeldes del Ejército Nacional Sirio como el grupo terrorista conocido como Organización para la Liberación del Levante (Hayat Tahrir al-Sham, HTS), agregó Pinheiro, quien ya había denunciado estos hechos el pasado 13 de marzo en una conferencia de prensa en Ginebra.
Ataques israelíes
El experto señaló que la misión de la ONU, que completan el egipcio Hanny Megally y la británica Lynn Welchmann, ha recibido ya denuncias de bombardeos y de saqueos de viviendas afectadas por el sismo por parte de combatientes de las distintas partes en conflicto.
También denunció los recientes ataques aéreos israelíes contra el aeropuerto internacional de Alepo, esencial para la llegada de ayuda humanitaria.
Pinheiro agradeció que algunos actores internacionales, como EEUU, la Unión Europea o Reino Unido, hayan relajado las sanciones contra Siria para facilitar la llegada de ayuda humanitaria, y les pidió que prolonguen estas exenciones más allá de las fechas inicialmente establecidas.
Posibles crímenes de guerra
Respecto al desarrollo del conflicto, que la semana pasada cumplió 12 años, el presidente de la comisión tripartita denunció la continuidad de ataques contra civiles por parte del Gobierno sirio, que en su opinión podrían ser considerados crímenes de guerra.
Similares acusaciones fueron lanzadas contra fuerzas rusas que actúan en Siria en apoyo del régimen de Bachar al Asad, contra fuerzas turcas y contra grupos de oposición.
"En el noroeste, el Ejército Nacional Sirio (opositor) y HTS torturan a detenidos y los mantienen en régimen de incomunicación a veces durante años", denunció Pinheiro, quien subrayó que muchos de estos arrestados fallecieron a consecuencia de los malos tratos recibidos o fueron ejecutados.