Varios agentes de la Policía norirlandesa (PSNI) han resultado heridos después de ser atacados por jóvenes católicos en diferentes puntos de la provincia, coincidiendo con las marchas orangistas que celebran la victoria del rey protestante Guillermo III sobre el católico Jaime II en la batalla del Boyne en 1690.
Según explicó un portavoz policial, "varios" agentes del orden resultaron heridos en el norte de Belfast, después de que un grupo de jóvenes atacasen a las fuerzas del orden en protesta por el paso este martes por el barrio católico de Ardoyne de un desfile protestante.
Los enfrentamientos comenzaron cuando un centenar de manifestantes nacionalistas lanzaron piedras, cócteles molotov y fuegos artificiales contra las fuerzas del orden, que respondieron con cañones de agua y balas de goma.
La PSNI había reforzado la seguridad en torno a la marcha orangista que transcurrió por Ardoyne, después de que el pasado año los disturbios en esta zona de la capital dejaran un balance de 48 agentes heridos.
Algunos medios norirlandeses culpan del brote de violencia al llamado Colectivo de Residentes del Gran Ardoyne (GARC), que organizó una protesta en respuesta a la decisión de la Comisión de Desfiles de permitir a la Orden de Orange marchar por este área nacionalista.
Ahora las rutas que siguen los "orangemen" son pactadas por representantes de ambas comunidades con la citada Comisión, lo que propicia que el paso de los hombres del traje negro, bastón en mano, bombín a juego y orla naranja al cuello, sea visto como una concesión y no una imposición.
Aún así, un amplio sector nacionalista todavía considera que estas marchas celebran la supremacía de la comunidad protestante-unionista sobre la católica-nacionalista, origen de los más de cuatro siglos de conflicto en Irlanda del Norte.
En ese sentido, las celebraciones del "Doce de julio" están organizadas desde hace tres años bajo la marca del "Orangefest", una iniciativa publicitaria lanzada por la Gran Logia de la Orden de Orange para limpiar su imagen sectaria del pasado y atraer turismo a la región.
Según fuentes policiales, también se registraron incidentes de menor importancia en el este de Belfast, en la localidad de Derry (oeste), en Armagh (sur), Antrim (norte) y la ciudad de Newry, en el condado fronterizo con la República de Irlanda de Down.
Este martes, 22 agentes de la PSNI resultaron heridos y cuatro de ellos tuvieron que ser hospitalizados, aunque su estado no reviste gravedad, después de que decenas de jóvenes nacionalistas lanzaran piedras y bombas de gasolina en el oeste de Belfast contra las fuerzas del orden, que respondieron con balas de plástico.