El presidente chino, Xi Jinping, resaltó este martes ante el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que su país no es un actor en la guerra de Ucrania, y que aunque tiene una buena relación con su homólogo ruso, Vladímir Putin, no debe sobrevalorarse su capacidad de influencia sobre él.
Sánchez y Xi se reunieron en los márgenes de la cumbre del G20 que se celebra en la isla indonesia de Bali, un encuentro en el que el jefe del Ejecutivo español pidió a su interlocutor que aproveche su cercanía con Putin para intentar que se ponga fin al conflicto en Ucrania.
El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, que estuvo presente en la reunión, aseguró en declaraciones a los periodistas que el diálogo se desarrolló en un tono de cordialidad y franqueza por ambas partes.
Explicó que Sánchez insistió en la posibilidad que tiene Xi de moderar la guerra en Ucrania y contribuir a que la paz regrese cuanto antes.
No precisó Albares la respuesta del presidente chino, pero fuentes oficiales españolas explicaron que Xi reconoció la buena relación que tiene con Putin y el hecho de ser países vecinos, pero al mismo tiempo y ante las peticiones de mediación que le han trasladado en esta cumbre Sanchez y otra media docena de líderes, ha señalado que no puede sobrevalorarse su papel.