El Gobierno de Chipre ha decidido establecer durante los siete próximos días estrictos controles de capitales que, entre otras limitaciones, prohiben a los ciudadanos del país sacar más de 3.000 euros en efectivo, así como retirar desde el extranjero más de 5.000 euros, según informa el diario griego 'Khatimerini'.
Las restricciones impuestas por Nicosia a la libre circulación de capitales contemplan también la prohibición del pago con cheques y la exigencia de toda la documentación relevante para realizar el pago de importaciones.
Asimismo, el decreto ley que aprobará el Gobierno plantea la exigencia de permitir expirar los plazos de vencimiento de los depósitos bancarios.
BERLÍN EVITA DESCARTAR LA IMPLICACIÓN DE DEPOSITANTES EN FUTUROS RESCATES
El Gobierno alemán recalcó hoy que el rescate a Chipre responde a un problema muy singular, pero evitó descartar abiertamente la implicación de los depositantes en futuros programas de ayuda a otros países de la eurozona.
En un encuentro rutinario de representantes del Ejecutivo con medios de comunicación especialmente tenso, tanto el portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, como la del Ministerio de Finanzas, Marianne Kothé, declinaron pese a la insistencia de los periodistas posicionarse claramente en esta polémica.
"Chipre es un caso singular y los instrumentos de su programa de ayuda son particulares. La solución para Chipre no se puede extrapolar para nuevos rescates", aseguró Seibert, que añadió que los automatismos y las soluciones generales "no funcionan".
No obstante, preguntado directamente sobre la posibilidad de volver a aplicar esta controvertida medida en nuevos programas financieros, no quiso dar una respuesta clara.
El portavoz del Ejecutivo agregó que el plan acordado por el Eurogrupo para Chipre contiene los "instrumentos correctos" para resolver los "problemas específicos" del país, esto es, su "sector bancario sobredimensionado".
A su juicio, el plan para Nicosia sienta las bases para un futuro "sostenible" y "sólido".
Kothé, por su parte, se limitó a indicar que los depósitos de menos de 100.000 euros están protegidos legalmente en toda Europa y garantizó la seguridad de los radicados en Alemania.
"Más no quiero decir", zanjó finalmente Seibert tras más de diez preguntas sobre la contribución de los depositantes al rescate chipriota y las polémicas declaraciones del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, al respecto.
En una entrevista esta semana, Dijsselbloem dejó abierta la puerta a que el modelo de rescate de Chipre pudiera en el futuro aplicarse a otros países, lo que generó serias turbulencias en los mercados financieros.
La Comisión Europea descartó ayer que las líneas trazadas por el programa de ayuda a Nicosia puedan conformar un modelo para futuros rescates en el seno de la eurozona.
En este sentido, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y el presidente de Francia, François Hollande, defendieron ayer en un encuentro en París que el acuerdo en torno a Chipre es "único" y "excepcional".