Una anciana que fue en la misma ambulancia que la auxiliar de enfermería contagiada de ébola, Teresa Romero, antes de que el vehículo fuera desinfectado ha estado aislada entre dos y tres días en una residencia de mayores de Leganés.
Juan Ignacio Doñate, sobrino de la octogenaria en cuarentena tras ser una de las siete personas que fue trasladada en la misma ambulancia que Romero, ha confesado "tener miedo" pero estar tranquilo al mismo tiempo por la salud de su tía ya que los epidemiólogos le han asegurado que las posibilidades de contagio son "pocas".
La anciana, Isabel, de 87 años, fue aislada en una habitación en la residencia autonómica de Leganés donde está ingresada tras conocerse que había compartido con Romero la misma ambulancia. Subió a ella después de haberse caído y hacerse una brecha en la cabeza.
Tras conocerse el contagio de Teresa Romero, los médicos de la residencia se pusieron en contacto con el sobrino para informarle que tenían que aislar a Isabel. Tras "dos o tres días" en esta situación, Juan Ignacio pidió que la trasladaran a su domicilio para estar con él y evitar el agravimiento de las patologías de la anciana con el aislamiento.
Finalmente se la llevó a su domicilio, con la autorización de los médicos. "Aquí estará hasta el día 28", que es cuando pasará el periodo de cuarentena, ha explicado Juan Ignacio Doñate.
Su tía no sabe nada de lo que está pasando en España con el virus ébola ni que ella es uno de los contactos de bajo riesgo. Su sobrino confiesa que "claro" que tiene "miedo" pero que le han asegurado los especialistas que las posibilidades de contagio son "pocas". "Los de Salud Pública me llaman todos los días y me dicen que las posibilidades son pocas. Tengo que confiar en ellos", ha asegurado.