El ayuntamiento creó la Unidad de Gestion de la Diversidad para hacer frente a las agresiones homófobas y otros delitos de odio, La integran 32 agentes de la policia municipal que se centran en los colectivos vulnerables de sufrir discriminación. Llevan 14 meses en activo y en las ultimas semanas, tras los atentados yihadistas, han intensificado su trabajo en la comunidad musulmana.
Los agentes, cuando detectan que se ha cometido un delito de odio, interviene policialmente o bien asesoran a las víctimas de los servicios municipales de los que se disponen o bien se les deriva a alguna asociación con las que colaboran. Las denuncias más frecuentes provienen del colectivo LGTBi.
Desde su creación, estos agentes han abierto 76 expedientes y tratado con casi 180 casos de discriminación. Algunos de los últimos, relacionados con ataques a la comunidad musulmana tras los atentados en Cataluña.
"Han ocurrido dos casos de temas islamófobos en la ciudad de Madrid, uno una agresión a una joven de origen Marroquí y otro unos carteles que colgó un grupo en la plaza de Colón", señalan.
Cada día del año, estas unidades móviles de gestión de la diversidad salen a patrullar por las calles de Madrid para garantizar la seguridad en las que puedan ser zonas o lugares de riesgo, como las mezquitas. Y lo hacen mediante la vigilancia discreta en los centros de culto y la comunicación con las asociaciones musulmanas.
Los casos de islamofobia, sin embargo, están muy por debajo de delitos de odio cometidos por racismo, ideología u homofobia, que suponen el 80 por ciento del total. Estadísticas que no se deben tanto a un incremento de los hechos discriminatorios, sino al aumentos de las denuncias