Las Máquinas devoran ya el edificio de la calle Lagasca que ha obligado a desalojar otros siete inmuebles y en el que falleció un obrero el pasado día ocho.
Tres noches han pasado ya los vecinos de los edificios colindantes fuera de sus casas, a día de hoy nadie les dice cuándo podrán regresar.
Se ha vuelto a cortar la calle y los comerciantes están indignados. Obligados a echar el cierre, ven peligrar la campaña navideña.
Tres noches han pasado ya fuera de sus casas los vecinos del entorno del número 46.
Tras retirarse la grúa esta mañana han comenzado los trabajos de demolición.
Unos trabajos que no sólo causan molestias a los vecinos también, como decimos a los comerciantes que no pueden abrir sus establecimientos en plena campaña de Navidad.