El presidente en funciones de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, y la alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, han firmado el convenio de realojo de la parte más marginal del Sector 6 de la Cañada Real que va a permitir iniciar ya el traslado de 150 familias en situación de extrema exclusión. Garrido y Carmena han firmado el convenio en presencia del Comisionado de la Comunidad para la Cañada Real, José Antonio Martínez Páramo y de su homólogo del Ayuntamiento, Pedro Navarrete; de los consejeros de Políticas Sociales, Carlos Izquierdo; y de Transportes y Vivienda, Rosalía Gonzalo; y del segundo teniente de alcalde del Ayuntamiento, Nacho Murgui, entre otros.
Este convenio permitirá realojar en dos años a 150 familias del sector 6 de la Cañada Real Galiana, una zona sin asfaltar dentro del Parque Regional el Sureste donde sus habitantes viven en situación de extrema vulnerabilidad y de exclusión severa. Garrido ha explicado que tanto la Comunidad como el Ayuntamiento financiarán la operación con 9 millones de euros y aportarán la mitad de la bolsa de viviendas en las que se realojará a las familias, en régimen de alquiler social.
El 60 % de las viviendas se repartirá en los distintos distritos de la capital, y el 40 % restante se repartirá por municipios de la Comunidad, garantizando así que las familias no sigan excluidas sino facilitando su inclusión en la sociedad, para lo cual la Comunidad y el Ayuntamiento harán un "acompañamiento y seguimiento" de las familias realojadas "antes, durante y después", para que afronten con éxito su integración.
Garrido ha especificado que en estos dos años se realojará a estas 150 familias, que suman unas 500 ó 600 personas (un 45-50 % de ellos menores) de las 4.000 de este sector, y serán las que viven en el tramo comprendido entre la incineradora de Valdemingómez y el final del término municipal de Madrid. Una medida, ha seguido diciendo, "de gran trascendencia", que pone "punto final a una situación de marginalidad" y que además permitirá recuperar ambientalmente una zona degradada ubicada en pleno Parque Natural del Sureste.
El presidente en funciones ha subrayado que este primer paso ha sido posible gracias al trabajo conjunto de las distintas administraciones de la mano de los vecinos, lo que representa una "muestra de madurez de la sociedad" y permite poner en marcha soluciones "realistas", que son "garantía de éxito". "Este pacto reúne lo que debe ser la acción política: hacer las cosas para todos -especialmente para los que más lo necesitan- y hacerlas con todos, porque con consenso salen y terminan bien", ha aseverado.
Manuela Carmena, tras firmar el convenio, ha agradecido el empuje de los vecinos de la Cañada, que "han hablado" y han hecho ver a las administraciones que "no puede haber subciudades" y han enseñado una lección: que la obligación de los políticos es escuchar a sus vecinos y dar solución a los problemas. Igual que Garrido, Carmena ha ensalzado la colaboración entre administraciones, y ha considerado que parte del éxito de que se hayan dado ya pasos positivos para recuperar la Cañada Real es que se haya "creado un pequeño centro de poder administrativo" en la zona, con el nombramiento de los Comisionados de la Comunidad y del Ayuntamiento "para que no se rompiera la relación entre la voluntad política y la realidad de la ejecución".
"Cuando los problemas están enormemente enraizados en la desidia, en la rutina, es muy bueno hacer estas medidas ágiles", ha afirmado, y lo que ha permitido imprimir "gran agilidad" al Pacto ha sido precisamente "constituir aquí un gobierno" sobre el terreno.
Martínez Páramo, por su parte, ha recalcado que cuando aún no se ha cumplido un año de la firma del Pacto por la Cañada, ya se ha cumplido un 40 % de los objetivos y otro 43 % está en marcha, con grandes avances como asfaltar el sector 6 (lo que permite que circulen ambulancias o rutas escolares), crear una línea de la EMT que comunica a los 7.000 habitantes con núcleos urbanos, o mejoras en el suministro de agua del sector 2.
El comisionado ha subrayado que la firma del convenio de hoy supone "un paso más, quizá el más importante", para seguir avanzando en el cumplimiento del Plan para la Cañada. Navarrete, en este sentido, ha subrayado la importancia de que los realojos empiecen precisamente en el sector 6, donde más casos de vulnerabilidad y exclusión hay, una zona donde hace unos meses "apenas se podía transitar". "Hoy comienza un nuevo día para cambiar la vida" en la Cañada, ha dicho.
Asunción, vecina del sector 6, ha agradecido la labor de las administraciones para realojar a las personas que viven en el barrio y para garantizarles "tener una vivienda digna, como todo el mundo. Que abramos una llave y se encienda la luz, o que abramos un grifo y caiga un chorrito de agua".
Otro vecino, por el contrario, ha dicho que hay personas que no quieren ser desalojadas, porque están dispuestas a pagar por sus viviendas y quieren una "oportunidad" para seguir en este entorno. "Somos honrados, trabajadores, queremos oportunidades para seguir en nuestras viviendas", ha pedido.