Organizaciones ecologistas y vecinos han denunciado ante la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) la tala masiva de árboles y aterramientos en las obras que el Ayuntamiento de Valdemorillo está llevando a cabo en las laderas del barranco de San Juan y han reclamado la paralización de los trabajo, "que se realizan en época de alto riesgo de incendios".
En concreto, los vecinos de las urbanizaciones Puentelasierra y Jarabeltrán han alertado del impacto de los trabajos de prevención de incendios que realiza la empresa Tragsa por encargo del Consistorio en el barranco del arroyo de San Juan, que además conllevan talas de pinos, enebros, encinas, sauces y fresnos, algunos centenarios.
Según relatan, maquinaria pesada que ha entrado en la masa boscosa que forma la zona verde de ambas urbanizaciones, abriendo pistas y produciendo el aterramiento de tramos del cauce arroyo que discurre por el fondo del barranco.
Solicitan la paralización de los trabajos
Las organizaciones ecologistas Asociación para la recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), Asociación Ecologista del Jarama El Soto, Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid, Grupo de Acción para el Medio Ambiente (GRAMA), Jarama Vivo y Liberum, "ante la inacción municipal, han solicitado la paralización de los trabajos y han denunciado los hechos ante a Confederación Hidrográfica del Tajo.
Estas urbanizaciones rodean el barranco, una zona de fuerte pendiente, repoblada con pino en la década de los años 60 y sobre la que se ha recuperado un encinar mixto con gran diversidad de vegetación arbórea y arbustiva, además de un bosque de galería en el arroyo.
De este modo, el barranco constituye la zona verde de ambas urbanizaciones y su mantenimiento es competencia de sus entidades urbanísticas. Sin embargo, el abandono durante décadas "ha favorecido la densificación y deterioro del pinar", han lamentado las organizaciones ecologistas.
Además, tras el paso del temporal Filomena se troncharon numerosos pinos y ramas sin que hasta la fecha se hubieran tomado medidas. Alegando falta de medios económicos, las entidades urbanísticas, solicitaron al Ayuntamiento de Valdemorillo que retirase las ramas y árboles caídos y podase y aclarase el pinar.
Sin embargo, a juicio de vecinos y estas organizaciones, se trata de una actuación "excesiva" que está "destruyendo" una zona de bosque mediterráneo de gran valor y desarrollando actuaciones invasivas y perniciosas sobre el cauce del arroyo de San Juan y el bosque de galería que constituye un hábitat de interés comunitario (92AO Bosques galería de Salix alba y Populus alba de la Directiva Hábitat).