Muchos madrileños han dormido al raso a la espera de que la Basílica de Medinaceli abra sus puertas. Este viernes los madrileños podrán venerar a Jesús de Medinaceli, Señor de Madrid, durante todo el día.
Como cada año el primer vienes de marzo la Basílica abre sus puertas para el tradicional besapiés. Multitud de devotos madrileños guardan largas horas de cola para dar las gracias al Señor de Madrid por los dones concedidos o interceder por la salud de los seres queridos y la resolución de sus más acuciantes problemas.
Entre las personas que guardan cola y han pasado al noche a las puertas de la Basílica se encuentra Manoli, también conocida por ser una de las habituales entre el público del Teatro Real en el Sorteo Extraordinario de Navidad de cada año.
Manoli cuenta que el Cristo de Medinaceli no le falla nunca. Lleva medio siglo acudiendo puntual a la cita. Su devoción es grande.
No sólo vienen madrileños de todas las partes de la Comunidad, también acuden devotos de otras partes del país como Gerona y Tarragona, muy "bien abrigados" para aguantar el frío de la noche madrileña.
"Me ha concedido todo lo que he pedido", dice una de las señoras mientras aguarda pacientemente en su sitio a que abra la Basílica. "Es el más grande", dice otra.
Llevan varios días pero ya quedan pocas horas. A la medianoche la Basílica abrirá sus puertas y podrán 'besar los pies' del Cristo y manifestarle su fervor.