Iberdrola se ha adjudicado el suministro de energía eléctrica con garantía de origen procedente de fuentes de energía renovables para Metro de Madrid por un importe total de unos 395 millones de euros durante los próximos cinco años.
En concreto, la energética se ha hecho con los cinco lotes que había puesto en juego la Comunidad de Madrid para los puntos de suministro alimentados en alta y baja tensión del Metro de Madrid para el período 2024-2028.
A pesar de que habían mostrado interés en la licitación, junto a Iberdrola, las eléctricas Endesa, Total y Audax, finalmente la única que presentó oferta para el contrato fue el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán.
La electricidad en alta tensión, que es la que se utiliza para transportar la corriente a grandes distancias, es la de mayor consumo de la red, llegando al 97,5% del total y, además de alimentar a todas las instalaciones de las estaciones, también se transforma para su uso en los trenes. En el caso de la energía de baja tensión, la que se genera para consumo propio, la empresa pública la utiliza para alimentaciones secundarias y algunas oficinas.
Sumando ambos tipos, gracias a la adopción de medidas para aumentar la eficiencia energética, en los próximos años se prevé una reducción del consumo anual de en torno a 1,1 millones de kilovatios/hora, según datos de Metro de Madrid.
La energía eléctrica es esencial para garantizar el funcionamiento diario de Metro de Madrid. En este sentido, el Gobierno regional de Madrid puso en el año 2012 en marcha el Plan de Ahorro Energético que ha tenido como resultado que el suburbano madrileño haya logrado una disminución del consumo anual del 25%, respecto al que tenía hace 13 años.