El distintivo bandera azul, que reconoce cada año las mejores playas por el buen estado de las aguas, el alto nivel de los servicios playeros y la seguridad de los bañistas, ondeará este verano de nuevo en el Pantano de San Juan de Madrid.
La Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac), promotora de la iniciativa, ha publicado este martes los datos de 2024 en donde destaca que España consigue en total 18 banderas azules más que el año pasado: 638 para playas (11 más que en 2023), 102 para puertos deportivos (5 más que en 2023) y 7 para embarcaciones turísticas (2 más que en 2023).
A nivel mundial, estos galardones azules están presentes en 52 países siendo España el que mayor número de distintivos tiene para playas seguido de Grecia y Turquía.
Respecto a los puertos deportivos, España ocupa el tercer puesto en banderas azules (102), detrás de Holanda y Francia.
Como dato curioso, España y Portugal alcanzan en 2024 la cifra de 1.187 distintivos (747 en España y 440 en Portugal), algo que "no sucede en ningún otro lugar del mundo", por lo que más del 23% de las banderas azules que ondean en el mundo lo hacen en la península ibérica.
En su primer acto público como secretaria de Estado de Turismo, Rosario Sánchez Grau, ha hecho hincapié en la protección del litoral y ha señalado que respetar el entorno, cuidar los destinos, conservar el planeta e intentar regenerar, deben ser un compromiso con acciones concretas desde todos los ámbitos de lo social y político.
"Somos potencia turística mundial y hemos de serlo también en sostenibilidad, que debe ser nuestra Bandera Azul", ha aseverado Sánchez Grau.
De las 694 playas presentadas en 2024, 638, es decir, el 91% ha obtenido el galardón, ha afirmado Palacios, quien ha explicado que el motivo más frecuente para no obtener este galardón azul es la mala calidad de las aguas de baño y el incumplimiento de la Ley de Costas, por exceso de ocupación o por presencia de instalaciones no autorizadas en las playas.
En este punto han recordado que para obtener el galardón, "no es obligatorio" contar con duchas en las playas y han desaconsejado su instalación por el "derroche innecesario de agua dulce" que provocan y por ser fuente de infecciones.