Más de la mitad de la juventud madrileña (50,7%)encuentra frecuentemente contenido sospechoso de ser falso en internet y un 42% lo verifica, según el estudio ‘Riesgos en los usos juveniles de las TIC: Estudio de la ciudad de Madrid’, elaborado por el Centro Reina Sofía de Fad Juventud y el Ayuntamiento de Madrid.
Según este estudio la percepción de la juventud madrileña sobre los riesgos asociados al uso de la tecnología es variada y significativa. La mayoría es consciente de la desinformación, siendo un problema ampliamente reconocido. Sin embargo, la lucha contra la desinformación sigue siendo un desafío debido a su omnipresencia en las plataformas digitales.
En Madrid, el 85% de jóvenes entre 15 y 29 chatea diariamente a través de aplicaciones de mensajería instantánea, sumergiéndose en un mundo digital que es parte integral de su vida cotidiana. Sin embargo, y pese al lugar central que ocupan las TRICO en la vida de la juventud, un 32% admite que no discute sus hábitos en Internet con nadie.
Su educación se basa, fundamentalmente, en el autoaprendizaje o en el ensayo y error, muchas veces asistido por el círculo de pares. Quedan lejos otros recursos como los padres y madres o la enseñanza más formal de los centros educativos y el profesorado.
Contenidos
En cuanto a los contenidos, se observa una alta frecuencia de circulación de mensajes de odio, coerción sexual (envío sin consentimiento de fotos o imágenes comprometidas de carácter erótico o sexual), grooming (acoso de adultos a menores) o el ciberacoso.
Un 18% de las personas encuestadas declara haber sufrido alguna de estas situaciones con frecuencia, expresando un significativo temor a sufrir alguna de estas situaciones, como la difusión de imágenes propias comprometidas, el acoso sexual o el ser objeto de estafas o timos.
Uso de internet
Además de los riesgos de desinformación y contenidos dañinos, la juventud madrileña enfrenta desafíos personales y relacionales debido al uso excesivo de las TRICO. Sin embargo, existe una conciencia importante por parte de la juventud madrileña de la dependencia que la tecnología genera, y que solo una parte minoritaria de los chicos y chicas manifiestan sentimientos de saturación por el uso excesivo de las mismas.
A pesar de estos desafíos que plantean las TRICO, Internet y las redes sociales son percibidas principalmente como fuentes de alegría (33.2%) y diversión (46%). Particularmente, plataformas como Instagram y TikTok destacan no solo por proporcionar diversión, sino también por ser espacios vitales para la autoexpresión y la construcción de identidades personales.
Esta tendencia se observa a lo largo de todas las edades, aunque los usos pueden diversificarse con el tiempo. A medida que los y las jóvenes crecen, su interacción con las tecnologías se enriquece, ampliando el espectro hacia el consumo de noticias y la búsqueda de información más compleja, lo que refleja un enfoque cada vez más maduro y diversificado del mundo digital.
Investigación
La investigación se ha llevado a cabo a través de la realización de 600 entrevistas online a una muestra de edades comprendidas entre los 15 y los 29 años entre febrero y marzo de 2023. El objetivo del estudio ha sido conocer cómo la población joven madrileña entiende, valora y vive sus propias circunstancias hacia internet y las redes.
Los resultados han sido presentados en el marco de la jornada 'Jóvenes y bienestar digital. Claves preventivas desde el análisis y la acción', celebrada hoy en el Centro de Cultura Contemporánea CondeDuque, y que ha sido inaugurada por la vicealcaldesa del Ayuntamiento de Madrid, Inmaculada Sanz Otero y la directora general de Fad Juventud, Beatriz Martín Padura. Los principales hallazgos han sido presentados por Eulalia Alemany, directora de Innovación de Fad Juventud.
Brecha digital
A pesar de la existencia de un uso intensivo y generalizado de las TRICO, el estudio identifica la existencia de una cierta brecha digital. La autopercepción de habilidad o destreza con aspectos relacionados con el manejo de las TRICO varía significativamente en función del género y del acceso a recursos.
- La mayoría de chicos y chicas declaran manejar hábilmente las TRICO en sus usos más básicos, como la búsqueda y consulta de información y la comunicación (mensajería instantánea, redes sociales).
- La percepción de habilidad desciende a medida que las tareas se complejizan, como en el caso de la resolución de problemas técnicos y seguridad.
- Las mujeres tienden a calificarse como menos diestras que los hombres en habilidades tecnológicas.
- La percepción de destreza o habilidad se incrementa con la edad, en línea con una mayor experiencia de uso y madurez tecnológica.
- Los y las jóvenes en entornos más desfavorecidos tienden a calificarse como poco hábiles en comparación con aquellos que tienen un mayor acceso a recursos y formación.
Los datos del estudio muestran un universo complejo y diferentes percepciones y vivencias de los usos tecnológicos. La valoración general es positiva, pero eso no impide que la población adolescente y joven sea consciente e identifique diferentes riesgos y problemas. Escucharlos y recoger sus voces es fundamental para poder intervenir y acompañar adecuadamente su socialización digital, asegurando su bienestar y un uso adecuado de la tecnología.
Las diferencias entre los chicos y chicas madrileños con los del resto del estado no son de gran entidad y, básicamente, sus actividades y experiencias en internet y redes sociales son comunes con sus compañeros de fuera de la capital.