Sólo el 6% de varones pide reducción de jornada para atender a sus hijos pequeños, frente al 31% de mujeres que lo han solicitado en alguna ocasión, según un informe sobre el impacto de la conciliación familiar y laboral en el bienestar de la infancia. El informe, presentado por el Defensor del Menor, Arturo Canalda, en la Asamblea de Madrid, ha sido elaborado por la Fundación MásFamilia y el 'Observatorio efr', que ha otorgado a 243 compañías españolas la certificación de 'empresas familiarmente responsables' (efr).
Según el estudio, la práctica totalidad de las empresas reconocen que las medidas de conciliación impactan positiva y directamente sobre el bienestar emocional (100%) y el rendimiento escolar (81%) de los hijos de sus colaboradores.
De ahí que el 80% de los padres y madres que trabajan demanden más facilidades para conciliar la vida familiar y la laboral, y el 76% valora muy positivamente medidas como la flexibilidad de horarios, el 'teletrabajo' o las excedencias con reserva de puestos de trabajo.
Una de las conclusiones del estudio es que el mercado laboral en España es "muy rígido" e impide ajustes en la jornada de trabajo, por lo que un 31% de mujeres han tenido que acogerse a reducciones de jornada por guarda legal en alguna ocasión.
El hecho de que sólo un 6% de los hombres se acojan a esas medidas indica que "la conciliación sigue siendo un asunto de mujeres", y que no está "igual de bien visto" que se acoja un hombre que una mujer, ha señalado el presidente de la Fundación MásFamilia, Antonio Trueba. A su juicio de Trueba, la falta de tiempo para estar con los hijos viene incrementada por la crisis, que ha generado mayor presión sobre el llamado "presentismo", que obliga al trabajador a permanecer un número de horas en la empresa en vez de optar por un modelo basado en la productividad y en el cumplimiento de objetivos.
Datos como que el 31,4% de los alumnos españoles tienen problemas para terminar la Secundaria -frente al 15,4% de media europea de fracaso escolar-, o que los adolescentes españoles se inician a los 13 años en el consumo de tabaco y alcohol, acentúan la importancia de impulsar medidas de conciliación.
Para el Defensor del Pueblo de la Comunidad de Madrid, Arturo Canalda, "un trabajador con su vida familiar organizada es mucho más productivo", por lo que aplicar medidas de conciliación constituye para las empresas "una inversión a corto, medio y largo plazo".
Pero, dado que este tipo de medidas no son económicamente rentables, ha abogado por que la Administraciones públicas den un paso en esa dirección y se conviertan en agentes para la gestión de ese cambio, otorgando por ejemplo "ayudas administrativas" a las empresas.
En cuanto al papel de los padres, el Defensor del Pueblo ha recordado que, para educar bien a los hijos, "no sólo hay que tener tiempo para estar con ellos, sino también querer tener ese tiempo".
Arturo Canalda se ha referido a los "niños llave", que pasan muchas horas solos en casa, acompañados de sus "niñeras electrónicas" (televisión, consolas, videojuegos), y también a los "niños capricho", fruto de un "exceso de benevolencia" motivado por "la mala conciencia de los padres" por pasar poco tiempo con ellos.
Pero los problemas de la infancia, ha dicho Canalda, no se producen sólo por la falta de tiempo de dedicación de los padres, sino también por una escasa sensibilización sobre la paternidad-maternidad responsable.
En este sentido, ha abogado por la labor que realizan las Escuelas de Padres, que están poco extendidas en España, donde sólo se imparten en un 17% de las empresas con certificación 'efr'.