Un jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid ha declarado culpable de asesinato a David Arellano por la muerte de su mujer en mayo de 2017 en Collado Villalba, si bien le exonera de la agresión sexual de la que había sido acusado al no dar por acreditado este delito, han informado fuentes jurídicas.
El juicio contra el acusado quedó el pasado viernes visto para sentencia con los informes finales de las partes y el silencio del procesado, quien optó por no hacer uso de su derecho a la última palabra. La fiscal Victoria Bonilla pidió al tribunal del jurado hacer Justicia para la víctima.
Se trata de la segunda ocasión que un jurado popular declara culpable a David. El primer veredicto de culpabilidad se anuló por irregularidades en las votaciones y el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ordenó repetir el juicio.
David se enfrentaba a una petición fiscal de prisión permanente revisable, mientras que su defensa solicitó la libre absolución al sostener que el autor del crimen es otra persona en base al ADN que se halló en los trozos de la cinta adhesiva con la que se ató por los pies a la fallecida.
Los hechos juzgados se produjeron sobre las dos de la madrugada del 27 de mayo de 2017 cuando el acusado y su mujer regresaron de una cena con amigos. Según la fiscal, el hombre violó, golpeó y asfixió a la víctima para evitar que le denunciara.
La fiscal aseguró en su informe que David asfixió a su mujer con una toalla o una almohada y que luego la remató con una bolsa de plástico, ya que los peritos manifestaron que estaba viva cuando se le colocó dicha objeto en la cabeza.
En la instrucción, consta que la víctima denunció a su marido ante la Guardia Civil y que manifestó entonces que le amenazó con que se iba a enterar. La mujer retiró días después la denuncia después de que David regresar al domicilio familiar tras una discusión.
David mantiene que sobre las doce de la mañana del día de los hechos se encontró el cuerpo sin vida de la mujer amordazada y con una bolsa en la cabeza al regresar de una salida en moto, apuntado a un posible robo como el móvil del crimen.