Los accidentes mortales registrados en 2012 en las carreteras madrileñas se redujeron un 35% respecto al año anterior y sobre todo bajaron entre los motoristas, con un 80% menos de siniestros con víctimas mortales que en 2011.
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha dado hoy a conocer estos datos en una visita al centro de conservación de carreteras de Cobeña, donde ha hecho balance de la evolución de la siniestralidad en las carreteras madrileñas entre 2001 y 2012.
Los datos recopilados en este estudio indican que en ese periodo los accidentes mortales se redujeron un 74%, pasando de 108 siniestros mortales y 125 fallecidos en 2001 a los 28 accidentes y 30 víctimas mortales de 2012.
El año pasado se registraron en las carreteras de la región 28 accidentes mortales con 30 víctimas, frente a los 43 y las 44 víctimas mortales de 2011.
El presidente ha destacado el descenso de siniestros con resultado de muerte entre los motoristas, donde la mortalidad bajó un 80%, pasando de 16 fallecidos en 2011 a 3, en 2012.
González, que ha supervisado la maquinaria que emplea la Comunidad para mejorar la seguridad vial de las carreteras de la región, ha comparado estos datos con los del resto de las carreteras españolas, donde la siniestralidad mortal ha sido muy superior a la de Madrid.
Así, en los diez últimos años los accidentes de tráfico mortales bajaron en la Comunidad de Madrid un 65,5%, mientras que en ese periodo la media nacional fue del 51%, en tanto que en las carreteras francesas descendieron un 48%, en las alemanas un 40% y en el conjunto de la Unión Europea, un 36%.
La Comunidad de Madrid, ha comentado González, dispone de siete centros de conservación de carreteras, dos de los cuales los gestiona directamente y el resto lo hacen empresas adjudicatarias.
Según datos del presidente, la red regional de carreteras abarca unos 2.600 kilómetros repartidos en 201 carreteras y por algunos de sus tramos circulan hasta 100.000 vehículos al día.
Esta intensidad circulatoria hace que el Gobierno regional invierta unos mil millones de euros al año en mejorar la seguridad de la red de carreteras de la Comunidad mediante la eliminación de "puntos negros", cruces y tramos peligrosos y otros 500 millones de euros a mantenimiento.
Según González, la Comunidad de Madrid es "probablemente una de las regiones españolas que más invierte en la seguridad de sus carreteras" y por ello ha recordado que anualmente se destinan unos 20.000 euros a mejorar las condiciones y la conservación de cada kilómetro de la red viaria regional.