La Guardia Civil investiga la identidad del cadáver en avanzado estado de descomposición hallado este lunes por una vecina de Las Rozas en una zona boscosa del término municipal por si se pudiera tratar del anciano con alzheimer que desapareció hace tres meses en Torrelodones, cuando salió de la residencia donde estaba interno. Los hijos han indentificado como suyas unas zapatillas halladas junto al cadáver. Ahora lo tendrán que ratificar las pruebas de ADN.
Los familiares de Saturnino Garzás, desaparecido hace más de dos meses de una residencia de Torrelodones han reconocido las ropas halladas en el cadáver encontrado ayer en una zona boscosa de la calle del Encinar del municipio de Las Rozas.
Fuentes cercanas a la investigación han confirmado a Efe que los hijos de Saturnino Garzas, que llevaba desaparecido desde el 26 de diciembre de la residencia de Torrelodones en la que estaba ingresado, han reconocido las prendas del cadáver localizado ayer.
La Guardia Civil no ha confirmado que se trate de Saturnino Garzas y ha señalado que está a la espera de los resultados de las pruebas de ADN.
Según han indicado a Efe las mismas fuentes, el cadáver del sexagenario se encontraba en avanzado estado de descomposición y fue hallado por una vecina de la zona a las 16.45 de ayer.
Agentes del instituto armado se personaron en el lugar y comunicaron el hecho a la autoridad judicial, que ordenó el levantamiento del cadáver y su traslado al Instituto Anatómico Forense para la práctica de la autopsia.
Saturnino Garzas, que padecía párkinson y alzhéimer, llevaba una semana ingresado en la residencia de Los Peñascales de Torrelodones cuando desapareció.
Desde entonces, su familia y amigos, fuerzas de seguridad, trabajadores de la residencia y agrupaciones locales no han dejado de buscarle.
SANCIONES A LA RESIDENCIA "LOS PEÑASCALES"
La Comunidad de Madrid ha penalizado a la residencia Los Peñascales, de gestión privada, tras la desaparición de este residente, que ocupaba una plaza concertada, con dos sanciones, una de 5.267 euros que ya ha sido confirmada y otra de 24.000 euros que está en fase de alegaciones.
Según han indicado a Efe fuentes de la Consejería de Políticas Sociales y Familia, tras la desaparición del sexagenario se iniciaron dos investigaciones paralelas, una por parte de la Subdirección General de Control de Calidad, Inspección, Registro y Autorizaciones (CIRA), y otra desde la Dirección General de Dependencia y Mayor.
Después de visitar el centro, los técnicos del CIRA decidieron que los hechos constatados podrían ser constitutivos de infracción administrativa grave tipificada en la Ley de Ordenación de la Actividad de los Centros y Servicios de Acción Social y de Mejora de la Calidad en la Prestación de los Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid, por no adoptar las medidas de cuidado y vigilancia de los usuarios.
Por ello, la consejería decidió incoar un expediente con una propuesta de sanción de 24.000 euros. La residencia presentó alegaciones pero se le ha notificado ya que se mantiene la propuesta de resolución. Ahora tienen otro plazo para presentar alegaciones.
Por otro lado, la Dirección General de Dependencia y Mayor, con base en lo previsto en los pliegos del contrato, ha penalizado a la empresa con 5.267 euros por considerar los hechos una falta muy grave por "deficiencia en el control y protección de los usuarios".
La residencia también presentó alegaciones, y la dirección general ya ha confirmado la sanción.