Bárcenas confirma que el PP tenía 'caja B': "Una contabilidad extracontable sin carácter finalista"

  • El PP niega la caja B y enmarca las palabras de Bárcenas en su estrategia de defensa
  • Dice que fue Rajoy quien ordenó cortar con Correa tras ser avisado por un empresario

El extesorero del PP Luis Bárcenas, ha asegurado en tres ocasiones que el PP disponía de una "contabilidad extracontable" que él y la persona encargada de las finanzas de las formación, su entonces jefe, Alvaro Lapuerta, anotaban. Estas donaciones procedentes de empresas "no tenían carácter finalista", ha asegurado.

Según ha explicado, distintos empresarios entregaban donativos siempre a través de Lapuerta y se les dejaba claro que estas entregas de dinero no tendrán ninguna contrapartida. "Todos los empresarios quieren echar una mano a los partidos políticos, a todos", ha explicado.

Bárcenas ha indicado que la intención de las empresas a través de estas contribuciones económicas era similar a la que cualquiera mantiene en su día a día con su médico o con el fontanero y pretendía sentar las bases para una buena relación. "Lo hacemos todos", ha destacado y ha añadido que luego pedían que se les "dejara bien" ante los responsables de la formación.

El extesorero ha mencionado expresamente al responsable de Constructora Hispánica Alfonso García Pozuelo que contribuyó a esta 'caja b' del PP: "Se recibían en efectivo y siempre por el señor Lapuerta, todos los donativos eran para la seguridad de la sede en el País Vasco y fueron recibidos por el señor Lapuerta", ha afirmado.

Además ha destacado la autoría de las anotaciones. "La reconozco, evidentemente (...) corresponde a que había determinados donativos y el señor Lapuerta y yo anotábamos quién entregaba esas cantidades y el uso que se hacía de ellas".

"Eran donativos sin carácter finalista, no respondían a ninguna gestión, no se contabilizaban oficialmente, es obvio, pero se llevaba un control de entradas y salidas (...) el señor Lapuerta como máximo responsable quería tener la certeza de que estaba bien controlado, y por eso le dábamos el visé para justificar ante terceros", ha destacado.

NO COBRO DE CORREA

En cuanto a los pagos del cabecilla de la trama Gúrtel, Francisco Correa, ha negado haber recibido de él dinero en efectivo. ""No he recibido absolutamente nada del señor Correa ni para mí ni para el PP", ha indicado de forma tajante en su primera jornada de declaración ante el tribunal de la Audiencia Nacional que le juzga por sus vínculos con la red.

Bárcenas se ha referido de forma concreta a las declaraciones efectuadas por Correa en las que aseguró que le entregaba sobres con efectivo en la sede del PP y en su casa. El empresario acusó al extesorero 'popular' de cobrar comisiones del 3 por ciento a cambio de interceder ante distintos Ministerios para que empresas como ACS y OHL recibieran adjudicaciones de obra pública.

"Eso es una idiotez", ha afirmado de forma tajante y ha explicado que los presidentes de ambas compañías cuentan con un alto nivel de interlocución con cargos del PP y no necesitan de intermediarios.

Bárcenas ha recordado que Villar Mir y Florentino Pérez cuentan con "algo llamado" palco del Bernabeu y pensar que para que les adjudiquen obra deban utilizar al gerente de un partido y "al señor de la agencia de viajes" es "una auténtica chorrada".

RAJOY DECIDIÓ CORTAR CON CORREA

El extesorero del PP Luis Bárcenas ha asegurado este lunes que fue el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien decidió cortar la relación del PP con las empresas del cabecilla de la Gürtel, Francisco Correa, tras ser avisado por un empresario de sus actividades ilícitas.

"Le hicieron una envolvente a Correa", ha asegurado ante el tribunal que le juzga por su relación con la trama. A partir de ese aviso, que llegó al presidente de mano del dueño de Licuas y de su yerno, Bárcenas recibió órdenes de dar por finalizadas todos los contactos.

En opinión de Bárcenas a Correa "se le subió a la cabeza" el nivel de relaciones que tenía en el PP que le hacían sentirse como una persona importante. "Estaba todos el día en el partido y por eso el partido debía hacer lo que él dijese", ha asegurado.

Bárcenas, que se ha sentado en la silla reservada a los acusados acompañado de un grueso maletín del que ha extraído varias carpetas, ha explicado en el arranque de su declaración, que su trayectoria laboral se ha centrado en actividades empresariales en banca y en grupos privados. "Durante un periodo de tiempo he sido el gerente de Alianza Popular primero y después del PP hasta el verano del 2009. Estuve cobrado hasta el mes de enero del año 2013", ha dicho.

En cuando a sus ingresos por esas actividades en España, Bárcenas ha explicado que está "todo declarado, absolutamente todo". "He tenido en liquidez un saldo importante durante prácticamente toda mi vida", ha puesto de manifiesto. La fiscal Concepción Sabadell ha iniciado su interrogatorio inquiriendo sobre la trayectoria tanto del extesorero popular como la de su mujer Rosalía Iglesias lo que ha provocado un pequeño enfrentamiento con el acusado que se ha quejado de que el Ministerio Público no sigue el orden de su escrito de acusación. "Yo soy quien hace las preguntas", ha atajado la fiscal.

En cuanto a las actividades de su esposa, ha explicado que se dedicaba de forma "menor" a la restauración de muebles antiguos y al arte y no generaba por estas funciones grandes beneficios. "Los ingresos los gestionaba yo", ha destacado.

DICE QUE NO COBRÓ RETRIBUCIÓN EN EFECTIVO

Luis Bárcenas ha negado que haya cobrado nunca en España ninguna retribución en efectivo, ni del PP ni de ninguna otra empresa o actividad."Como retribución está todo declarado", ha comenzado declarando Bárcenas en el macrojuicio de Gürtel a preguntas de la fiscal sobre las cantidades que ha cobrado en España por su trabajo.

El extesorero ha afirmado que nunca ha tenido "ninguna otra retribución" ni "compensación" que "justificase tener dinero en efectivo" y que todos los pagos por su trabajo los recibía en cuentas bancarias en España.

Bárcenas se sienta hoy en el banquillo acusado por primera vez de corrupción en la trigésima jornada del macrojuicio de Gürtel, en el que se acusa a 37 personas relacionadas con la trama por sus actividades corruptas en el periodo comprendido entre 1999 y 2005.