En una conversación informal con los periodistas en el vuelo en el que se ha trasladado a Letonia para visitar al contingente militar español en este país, Sánchez ha apelado a la unidad de todos como elemento de disuasión.
Tras los reproches de Podemos, ha explicado que ha hablado con Yolanda Díaz e Irene Montero, pero no con Ione Belarra, y ha recordado que ha habido dirigentes de la formación morada que han matizado la posición.
Sánchez ha recalcado que el "no a la guerra" es un grito que comparte la mayoría de la ciudadanía, y el PSOE dijo no a la guerra de Irak en 2003 y ahora también.
Para él, en este conflicto está claro quién es el agresor y quién el agredido y así lo ha demostrado la Asamblea de Naciones Unidas al expresarse 141 países en contra de la actuación del presidente ruso, Vladímir Putin.
Tal y como explicó ante el pleno del Congreso, rectificó su decisión inicial de no enviar armas directamente a Ucrania por la constante evolución del conflicto y en aras de la unidad ante las peticiones que le habían hecho varios partidos.
Respecto a las consecuencias económicas de la guerra ha insistido en que el Gobierno hará todo lo que esté en su mano para frenar el impacto en las familias y en las empresas y ha recalcado que en esa dirección van las medidas que anunció en su comparecencia de la pasada semana ante el Congreso.
También en este aspecto considera trascendental la unidad en todos los ámbitos, entre ellos el de los agentes sociales y con los que se reunió el lunes en el Palacio de la Moncloa.
Sánchez ha insistido en la necesidad de que la Unión Europea avance hacia la autonomía energética y defiende por ello que se impulsen las interconexiones pero no solo de gas, sino también de hidrógeno verde y con cargo a los presupuestos de la UE.
En ese contexto, ha expresado su satisfacción por la conversación que mantuvo el pasado domingo con el presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune, ya que este le reiteró que el suministro de gas a España está totalmente garantizado.
Sánchez ha asegurado que en esa conversación no hablaron de la relación entre Marruecos y Argelia.
Asimismo, apuesta por buscar vías alternativas a importaciones relevantes para el sector agrario español que provenían de Rusia y Ucrania y apunta a otros países para ello, como Argentina, Estados Unidos o Brasil.
La guerra en Ucrania también cree que afectará a la decisión que debe adoptar la Unión Europea sobre el restablecimiento de las reglas fiscales que quedaron suspendidas a causa de la pandemia de coronavirus.
No se aventura Sánchez a vaticinar la evolución del conflicto en las próximas semanas, aunque reitera su análisis de que Putin cometió el error de creer que Ucrania no iba a oponer la resistencia que está demostrando y de que la comunidad internacional y, en concreto Europa, no iban a estar unidas en el rechazo a su acción.
Importante considera que es el papel que puede jugar China al abrirse a mediar en el conflicto como ha hecho también Turquía para ser sede de una próxima reunión de los ministros de Exteriores de Rusia y Ucrania.
En cuanto a la acogida de refugiados, ha avanzado que el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, dará a conocer a finales de semana la ubicación de centros de acogida por toda España.
Una cuestión para la que está en contacto con comunidades y ayuntamientos y que estará también presente en la Conferencia de Presidentes que se celebrará el próximo domingo en La Palma.
A la espera de que se conozcan esas decisiones, Sánchez ha garantizado que "España va a dar ejemplo" en esa acogida a refugiados ucranianos.
La crisis provocada por la guerra ha considerado que debe de influir también para que sea posible avanzar en el Pacto de Migración y Asilo de la UE y cuya negociación está bloqueada.