La Policía Nacional ha detenido hoy en varias provincias españolas, principalmente en Madrid y Barcelona, a cerca de medio centenar de personas de la principal banda criminal georgiana a nivel internacional a la que se atribuyen más de cien robos en domicilios en España, han informado fuentes policiales.
El juez ha ordenado la entrada y registro de más de sesenta domicilios, 26 de ellos en Madrid.
También se han efectuado registros en Barcelona, Sevilla y Barakaldo (Vizcaya).
En los registros se han incautado 71 relojes, innumerables piezas de joyería procedentes de robos con fuerza, 14.000 euros, dos armas de fuego simuladas, 2.500 cajetillas de tabaco, seis armas blancas, múltiples utensilios para abrir y forzar puertas, varios pasaportes falsos, casi 200 resguardos de transferencia de envíos de capital al extranjero, numerosos teléfonos móviles y equipos electrónicos.
Entre los detenidos en Sevilla se encuentral el lugarteniente de Spartak J., el jefe de la banda de georgianos. Se trata de la mano derecha del cabecilla, quien podría encontrarse en Italia, y el encargado de controlar las células operativas de la banda, en suma, de organizar el "trabajo" de cada una de ellas.
De momento, han sido detenidas 48 personas en varias provincias españolas, principalmente en Madrid, así como a otras siete que ya estaban en la cárcel, en una operación que continúa abierta y en la que se han practicado 26 registros domiciliarios.
De los detenidos, tres lo han sido en Baracaldo (Vizcaya), dos en Barcelona, uno en Sevilla, uno en Alicante y el resto en Madrid, a quienes se les atribuye además de delitos de robo, blanqueo de capitales y receptación.
Por este delito, la Policía ha registrado algunas tiendas de compraventa de oro de diversas zonas de Madrid donde llevaban las joyas robadas.
Se trata de lo que podría denominarse una segunda fase de la operación que el año pasado permitió el arresto de 30 personas, pero muchas de ellas quedaron en libertad y crearon otras estructuras en una especie de regeneración de la banda.
La operación está siendo llevada a cabo por las brigadas Central de Crimen Organizado y de Policía Judicial de Madrid y está coordinada por el Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía Anticorrupción.
Una oficina móvil de Europol y varios policías franceses adscritos a la Unidad de Crimen Organizado se han desplazado a España, mientras que dos agentes españoles se han trasladado a Georgia, ya que se espera que haya también arrestos en ese país.
La Policía estima que se trata de la organización criminal de georgianos que más robos internacionales ha cometido.