El crecimiento económico español será en 2010 negativo, del -0,2%, según las previsiones de la OCDE, que estima que en 2011 el PIB aumentará un 0,9%, de tal manera que se mantienen las perspectivas anunciadas en mayo pasado.
El desempleo alcanzará un techo en España en 2010, con el 19,8% de paro, que el año que viene se reducirá ligeramente, hasta el 19,1%, según el informe de perspectivas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
16,5% DE PARO A FINALES DE 2012
Sólo a finales de 2012 el paro se situará en el 16,5%, señaló la OCDE, que cree que será ese año cuando se noten las consecuencias en la creación de empleo de las medidas de reforma del mercado laboral aprobadas el pasado mes de septiembre. Será ese año cuando el crecimiento económico experimente una consolidación, con un aumento previsto del PIB por la OCDE de hasta el 1,8%.
La organización constata que el PIB aumentó en España un 0,2% durante el segundo trimestre de 2010 como consecuencia del empuje de la demanda privada, previo al incremento del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) que entró en vigor el 1 de julio.
Durante el tercer trimestre del año el crecimiento se estancó precisamente por efecto de la subida del IVA y la OCDE destaca que el estancamiento alcanzó también al sector exportador, mientras que se detectó una caída de la confianza empresarial.
EN EL AÑO 2011
En cuanto al crecimiento del PIB esperado en 2011, la organización considera que estará alentado por la demanda externa y, en cierta medida, por el consumo privado. Las previsiones de la OCDE para España son algo mejores que las del propio Gobierno español para 2010, puesto que Madrid prevé una caída del PIB del -0,3%, aunque es menos optimista con respecto al crecimiento esperado en 2011, que las autoridades españolas sitúan en el 1,3% de aumento.
FONDO MONETARIO INTERNACIONAL
El Fondo Monetario Internacional prevé que el PIB español caiga un -0.3% este año y crezca un 0,7% en 2011, mientras la Comisión Europa estima que el crecimiento español será del -0,3% en 2010 y del 0,8% el año que viene. La OCDE valora que las consecuencias de las medidas de consolidación fiscal aplicadas en España en todos los niveles de gobierno serán un recorte del déficit desde el 9,2% pronosticado para este año -en relación con el PIB- hasta el 6,3% en 2011 y el 4,4% en 2012.
La organización considera que aún habrá que conocer el detalle de algunas reducciones de gasto anunciadas para 2012 y estima que el Gobierno debería estar dispuesto a "introducir nuevas medidas" para asegurarse de que se cumplen los objetivos.
Una vez más, la OCDE cree que la reforma de las pensiones es "necesaria" para que las cuentas públicas sean "sostenibles" y estima que para que las reformas laborales emprendidas el pasado verano den fruto habrá que incrementar la eficacia de los servicios públicos de empleo.
La OCDE constata que las turbulencias que han afectado a los mercados financieros de la eurozona han tenido como consecuencia el aumento del coste para la financiación del Gobierno y en el mercado interbancario durante mayo y junio.
La organización alude a las pruebas de resistencia aplicadas a la banca española y cree que sus resultados sirvieron para estabilizar la confianza de los inversores.
En cuanto a los tipos de interés de la deuda y de la banca, reconoce que se redujeron de manera significativa pero que el diferencial de la deuda soberana española en relación con la de Alemania es "sustancial".