La ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, ha anunciado en el Congreso que se reunirá periódicamente con un grupo de trabajo --en el que se encuentra la ex ministra de Igualdad, Bibiana Aído --, para estudiar "caso por caso" las muertes registradas por violencia de género.
"Hemos entendido que es bueno hacer un análisis caso a caso de este año y también de los anteriores, sobre las particularidades de cada una de las víctimas, porque también los comportamientos cambian y es importante poder hacer estudios particulares y pormenorizados de cada una de las víctimas. Vamos a actuar conjuntamente", ha destacado tras reunirse con los secretarios de Estado de Igualdad y Seguridad, Bibiana Aído y Antonio Camacho, respectivamente, el delegado del Gobierno para la Violencia de Género, Miguel Lorente, la Fiscal de Sala Soledad Cazorla y la presidenta del Observatorio contra la Violencia de Género, Inmaculada Montalbán.
Antes de participar en el debate y posterior aprobación de la ley Antitabaco en el pleno de la Cámara Baja, ha avanzado su voluntad de reunise igualmente con las portavoces parlamentaria de la Comisión de Igualdad del Congreso para trasladarles las conclusiones de esta reunión de grupo, así como para conocer su opinión.
Además, también ha manifestado su interés en reunirse organizaciones de mujeres, con las que siempre afirma haber tenido una colaboración y una interlocución "fluida". "Son las que siempre conocen la realidad de muchas de las víctimas de las que estamos hablando", ha puntualizado.
Según ha explicado Pajín, el principal objetivo de este grupo ha sido poner en común cuál es la realidad de la violencia de género en España, además de analizar la "causística" y ver qué medidas se pueden seguir adoptando en la materia.
A falta de la confirmación oficial del caso de Boadilla y de la muerte de una mujer en Porzuna (Ciudad Real), supuestamente víctima de violencia de género, Pajín ha señalado que el número de mujeres que han sido asesinadas por este motivo en 2010 asciende a 72.
"Las 72 muertes --por violencia machista-- nos desgarran, son tremendas en una sociedad y tenemos que seguir combatiendo con todos nuestros instrumentos y todas nuestras fuerzas", ha comentado Pajín.
Esta unidad de trabajo, según ha explicado, ha convenido por unanimidad que la Ley Integral contra la Violencia de Género es "un gran instrumento" contra el maltrato, ya que está protegiendo a cientos de miles de mujeres y que, "por primera vez en mucho tiempo, hay miles de hombres que están pagando su pena por maltratar a sus mujeres en la cárcel".
IMPONER MAS PULSERAS
Pajín ha indicado que esta normativa no es "estática" y. por tanto, considera que hay que seguir mejorándola y perfeccionándola. En este sentido, considera "útil" estimular algunas de las medidas de protección, tales como las pulseras.
Para ello, ha explicado que ha hablado con el CGPJ para analizar cómo se puede trabajar en los próximos meses para estimular que este instrumento de protección sea aplicado "de forma más generaliza, o incluso por parte de los jueces".
Asimismo, ha resaltado el empleo de estudios criminológicos en los casos por violencia de género, un anuncio del Consejo de Ministros pasado que "pasó desapercibido", pese a que es una reivindicación por parte de casi todas las formaciones parlamentarias en la Comisión de Igualdad de la pasada semana.
Además, han previsto avanzar y mejorar los protocolos de la asistencia sanitaria. "Entendemos que pueden ser tremendamente útiles para la detección precoz de la violencia de género por parte de las mujeres", ha puntualizado.