Los restos del fundador de Falange, José Antonio Primo de Rivera, han sido exhumados en la más estricta intimidad por deseo de su familia, que tomó la decisión de inhumarlo en el cementerio de San Isidro de la capital tras decidirse la salida del Valle de los Caídos.
La familia de José Antonio Primo de Rivera ha agradecido "la comprensión de muchos españoles que quieren y admiran" a su tío abuelo y que han entendido "de forma serena" la decisión de exhumar sus restos del Valle de los Caídos en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática."Agradecemos la comprensión de muchos españoles que quieren y admiran a José Antonio y que de forma serena han entendido la decisión de la familia", ha dicho la familia de Primo de Rivera en una nota remitida a los medios.
Otras reacciones
El traslado ha provocado diversas reacciones políticas. El Gobierno ha destacado la normalidad del cumplimiento de la Ley de Memoria Democratica.
VOX acusa al Ejecutivo de promover la división entre españoles. El Partido Popular, incluida la presidenta Ayuso, consideran que el hecho es propaganda para desviar la atención de los problemas reales de los ciudadanos.
Ciudadanos no ve noticia en la exhumación de José Antonio. Es el cumplimiento de una ley, afirman.