El coordinador en Cataluña de la Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC), Bartolomé Barba, padre de dos de los alumnos del IES El Palau que se sintieron humillados por los comentarios de sus profesores tras el 1-O, cree que el "adoctrinamiento" en la escuela catalana es "continuo". La Fiscalía de Delitos de Odio ha denunciado a nueve profesores del IES El Palau de Sant Andreu de la Barca (Barcelona) por sus comentarios en clase criticando la actuación policial el 1-O, pese a la "humillación" que sabían que podían causar a alumnos hijos de agentes de la Guardia Civil, a los que hicieron que se señalara frente a sus compañeros de aula.
En declaraciones a Efe, Barba ha comentado hoy que el 2 de octubre, cuando los profesores hicieron estos comentarios y señalaron a sus hijos, de 14 y 16 años, tuvo que ir a sacar a los niños del colegio: "papá, ya no puedo estar más aquí", le dijo uno de ellos.
Según la Fiscalía, los profesores denunciados de este instituto -localidad donde la Guardia Civil tiene su mayor casa cuartel de Cataluña- hicieron en clase, el día 2 de octubre, comentarios tildando a los agentes de la Guardia Civil de "animales", "bestias que solo saben dar palos", "parecen unos perros rabiosos", "salvajes" e incluso pidieron a los hijos de los agentes que levantaran la mano, señalándolos así frente a sus compañeros.
Barba ha explicado que sus hijos le contaron que los profesores les obligaron a salir al patio a hacer una manifestación contra la "brutalidad policial" de la Guardia Civil y que no duda de la credibilidad del relato de los menores en relación a la "gravedad" de los comentarios proferidos por los docentes.
"Fueron palabras y actitudes muy duras. Los profesores representan que son un referente moral y su actitud fue muy grave", ha indicado Barba, que ha denunciado que el "adoctrinamiento es continuo" en la escuela catalana y que ese día, el 2 de octubre, fue aún "más evidente".
"Es más complejo, no es cosa de un día, viene de lejos", ha lamentado el coordinador de la AEGC, que ha explicado que sus hijos no fueron al instituto el 3 de octubre y que otros alumnos hijos de guardia civiles han tenido que ir al psicólogo tras la "humillación" sufrida en clase.
Barba ha asegurado que ahora la situación se ha calmado un poco en el instituto, aunque está convencido de que es porque se ha puesto el foco mediático sobre los hechos ocurridos y los profesores se sienten observados: "con una cámara encima no son tan valientes".
Barba, que fue quien interpuso la primera denuncia ante Fiscalía por estos hechos, ha asegurado que la AEGC se personará como acusación particular en la causa, que instruirá el juzgado de instrucción número 3 de Martorell (Barcelona).