La calidad de vida en España descendió el año pasado tras haber crecido ininterrumpidamente desde 2014 y los descensos más acusados se dieron en salud, entorno y medioambiente, y condiciones materiales de vida.
Así se desprende de una primera estadística experimental del Indicador Multidimensional de Calidad de Vida (IMCV) para el periodo 2008-2020, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y dado a conocer este jueves.
Se trata de un indicador compuesto de medición de calidad de vida, sometido al escrutinio de los usuarios con el fin de mejorar su metodología. Está compuesto de nueve dimensiones que agrupan un total de 55 indicadores, los cuales provienen de muy diversas fuentes, muchas de las cuales no ofrecen datos anuales. Por ello, se actualizan anualmente únicamente seis dimensiones (34 indicadores).
Este Índice puntúa con 100 puntos a 2008. En los años siguientes se produjeron pequeñas oscilaciones hasta llegar a 99,98 puntos en 2013. En 2014 se inició una subida constante hasta alcanzar el pico de 102,06 puntos en 2019. El año pasado bajó a 101,71 puntos tras seis ejercicios de incremento sostenido.
Las dimensiones de salud, entorno y medioambiente, y condiciones materiales de vida, sobre todo debido a la disminución de la esperanza de vida por la pandemia de COVID-19, contribuyeron especialmente a ese descenso.
También empeoraron indicadores subjetivos (como la población que sufre problemas por ruidos exteriores a la vivienda) y aumentó el número de hogares en carencia material severa.
Por el contrario, el año pasado mejoraron los indicadores de las dimensiones de trabajo, educación y seguridad. No se actualizan en 2020 las de ocio y relaciones sociales, gobernanza y derechos básicos, y experiencia general de la vida, dado que se construyen a partir de indicadores que no se obtienen todos los años. El INE tiene previsto obtener los distintos indicadores que permitan actualizar en encuestas de 2022 y 2023.
Por Comunidades Autónomas
Por comunidades autónomas y tomando conjuntamente las nueve dimensiones del modelo de calidad de vida, Navarra, La Rioja y Aragón presentaron el año pasado los niveles más elevados de calidad de vida. En el lado contrario, los registros más bajos se dieron en Andalucía, Canarias y Murcia.
Si se analizan las nueve dimensiones por separado, País Vasco destaca en condiciones materiales de vida, trabajo y educación; Navarra en salud y entorno y medioambiente, Cantabria en ocio y relaciones sociales, y seguridad física y personal, y Baleares en gobernanza y derechos básicos, y experiencia general de la vida.e cualquier vía o soporte.