El juez de guardia de Granada ha decretado libertad provisional, comunicada y fin fiianza para Juana Rivas, la madre de Maracena que ha permanecido ilocalizable tras no entregar sus hijos al padre, condenado en 2009 por un delito de lesiones en el ámbito doméstico, y que ha comparecido ante el juez este martes. El Juzgado de Guardia de Granada la seguirá investigando por los supuestos delitos de sustracción o retención ilegal de menores y desobediencia a la autoridad judicial.
A las puertas de la sede judicial la propia Juana Rivas ha señalado que "No me voy a la cárcel, me voy a mi casa con mis niños y vamos a seguir peleando". Allí, a la salida del juzgado, se ha felicitado de que se ha encontrado "un juez humano, un ser humano que me ha escuchado porque quería que escuchara lo que estaba pasando".
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, tras una larga declaración, en la que la detenida sólo ha contestado a preguntas de su defensa, el juez ha considerado que la gravedad de la pena del presunto delito que haya podido cometer la madre no justifica la medida excepcional de prisión provisional, que ha solicitado la Fiscalía.
La Fiscalía, que ha pedido el ingreso el prisión ante la negativa de la mujer a cumplir la orden judicial de entregar a sus hijos, de 11 y 3 años, a su padre italiano, ha informado a Efe de que mañana se reunirá para decidir sobre la presentación, o no, del recurso de apelación que cabe contra el auto de libertad provisional de Rivas.
Juana Rivas llegó en torno a las 11,00 horas de este martes al aparcamiento de los juzgados de Caleta, tras ser trasladada en un coche policial desde el parking público situado en esta zona de la capital granadina, al que ha llegado en compañía de su asesora jurídica y directora del Centro Municipal de la Mujer de Maracena, Francisca Granados.
Según el alto tribunal, el juez ha considerado también para acordar la libertad provisional de Juana Rivas la no existencia de antecedentes penales de la madre, el arraigo social que no hace suponer riesgo de fuga y la circunstancia de estar litigando en la actualidad en otros juzgados.
Para el juez de guardia, que sólo ha resuelto la situación personal de la investigada, la "alarma social" nunca justificaría una medida tan grave como es la prisión provisional.
Asimismo, el juez de guardia se ha inhibido a favor del Juzgado de Instrucción Número 2 de Granada, que seguirá con la investigación de unas actuaciones que ya inició por la vía penal por unos hechos que podrían ser constitutivos de delito.
El TSJA ha recordado en su comunicado que sigue vigente la entrega de los niños al padre italiano como se ha acordado tanto por la vía civil como por la vía penal.
En la vista de ayer, la titular del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada acordó la retirada del pasaporte de los dos niños así como la prohibición de su salida del territorio Schengen, sin autorización del padre o sin permiso judicial.