La Policía de Málaga ficha a un perro robot "absolutamente autónomo e indestructible"
De momento el prototipo se encargará de vigilar el uso imprudente de los patinetes en la ciudad
EFE
Tiene cuatro patas y apariencia de perro, pero corazón de metal. De momento no tiene nombre (aunque suena el de Ricardo), pero este robot dotado de inteligencia artificial ha sido diseñado en la Universidad de Málaga (UMA) para apoyar a la Policía Local en labores de patrulla, con una primera misión: detectar patinetes imprudentes.
En su debut junto a la Policía por la céntrica calle Larios, el robot ha causado tanta expectación mediática y revuelo entre los viandantes como una estrella de cine.
"Hasta las multas van a hacer los robots", espetaba un ciudadano al verlo pasar; "also english", reclamaba un turista; no le han hecho mucho caso los perros de carne y hueso.
El can tecnológico está planteado como un "elemento de apoyo a la Policía" y puede grabar vídeo y analizarlo en tiempo real, aseguran sus creadores.
También puede "detectar situaciones preconfiguradas de problemas en la vía urbana" y alertar de las emergencias.
Con un peso de 35 kilos, el robot lleva varias computadoras que hacen analítica de imágenes, cámara 360, GPS y tecnología de conducción autónoma.
El prototipo es capaz de andar hacia adelante y hacia atrás, de subir escaleras, de sentarse, darse la vuelta sobre sí mismo y cambiar las patas hacia ese lado.
El robot puede patrullar de forma autónoma a una velocidad de 1,3 metros por segundo y puede ir a trote, aunque "de momento no se usa esta función para evitar daños a la tecnología que lleva embarcada".
Dispone de varios orificios que le permiten añadirle más equipamiento de cara a desarrollar otras funciones , como la asistencia en catástrofes, que serán probadas próximamente.
Tiene apariencia de perro pero las vidas de un gato: "Es absolutamente autónomo y casi indestructible", aseguran sus creadores, el Instituto de Tecnología e Ingeniería del Software (ITIS) de la UMA, en colaboración con la Unidad de Defensa y Seguridad de Telefónica y la pyme española ALYSIS, con la financiación de fondos Next Generation.