Veintiuna familias se han quedado sin casa este martes, en cuestión de minutos, por el derrumbe de un edificio de cinco plantas (tres en altura más dos sótanos) ubicado en el número 21 de la calle San Francisco de Teruel, que había sido desalojado momentos antes y que, por eso, no ha provocado víctimas personales.
Los vecinos han comenzado a escuchar crujidos en el inmueble, construido en los años 60, y han avisado al Ayuntamiento y a los bomberos.
El edificio ha colapsado tras la evacuación del último vecino y en el momento en el que los agentes, desde el inmueble anexo, comprobaban que no quedaba nadie dentro.
Ahora tendrán que ser los servicios técnicos los que analicen la causa del derrumbe, ha indicado el inspector de la Policía Local de Teruel, Ángel Loras, quien también ha dicho a los medios que los pilares maestros eran "como papel de fumar" y estaban "totalmente colapsados".
Según José Luis Alejos, jefe de intervención de la zona Oeste del Servicio de Bomberos de la Diputación de Teruel, el edificio se ha podido ver afectado por las recientes lluvias en la ciudad, que han debido realizar algún desplazamiento de la cimentación, y por eso ha colapsado, "pero hay que estudiarlo", ha declarado.
Según Aragón Noticias, una de las vecinas desalojadas ha relatado que a primera hora de la mañana los ruidos les han alertado: "Vivía en el primero y desde las 7.00 de la mañana he empezado a escuchar ruidos. He salido después y he visto como la presidenta alertaba a todos los vecinos. Había grietas de asentamiento en el edificio, pero no había notado nada raro en los últimos días".
"PILARES DE PAPEL"
El inspector de la Policía Local de Teruel, Ángel Loras, ha explicado que los pilares maestros del edificio de cinco plantas que se ha derrumbado este martes en Teruel, sin causar daños personales, eran "como papel de fumar" y estaban "totalmente colapsados".
Loras ha explicado que el edificio ha colapsado tras la evacuación del último vecino y en el momento en el que los agentes, desde el inmueble anexo, comprobaban que no quedaba nadie dentro, ya que también se han desalojado los dos edificios contiguos.
Ahora tendrán que ser los servicios técnicos los que analicen la causa del derrumbe, ha indicado. No obstante, entre los vecinos barajan la posibilidad de que hayan influido las intensas lluvias de los últimos días.
OTROS DESALOJOS
El jefe de intervención de la zona Oeste del Servicio de Bomberos de la Diputación de Teruel, José Luis Alejos, ha avanzado que no hay víctimas bajo los escombros, si bien se espera que este extremo se corrobore tras la intervención de la unidad canina de la Diputación de Zaragoza.
El edificio anexo también presenta afecciones, ha comentado Alejos, al observar que es una edificación más antigua y tiene daños estructurales en el ático, por lo que se plantea derribarlo con la ayuda de una grúa, ha avanzado en declaraciones a los medios de comunicación.
Además de las 21 familias del edificio que ha colapsado "también se han desalojado tres edificios por la parte de arriba y otros tres en la zona inferior, además de las de enfrente", ha apuntado.
En total han sido ocho los edificios desalojados por precaución, aunque los vecinos han podido entrar a recoger mascotas, ha apostillado Alejos.
Respecto a que el agua haya podido ser la causa del derrumbe ha dicho que serán los técnicos los que lo determinen. "No se puede negar que ha llovido abundantemnete y que pudiera haber algún corrimiento, pero serán los técnicos los que determinen como se ha producido".