Que este verano está siendo uno de los más caros para viajar no es ninguna sorpresa y es que los precios han subido en concreto un 10,6% y la noche de hotel, de media, nos cuesta actualmente 150 euros mientras que hace un año valía 136 euros.
Pero estos datos son de media, porque en zonas tan demandadas como Chiclana, en Cádiz, la habitación está por encima de los 350 euros, o 250 euros en Marbella, muy similar a los precios de Benidorm, Alicante.
“Los que se han dormido para reservar, ahora está muy caro, pero los que reservaron con tiempo sus vacaciones se beneficiaron de unos precios mucho mejores”, nos ha contado Fede Fuster, presidente de Hosbec (patronal hotelera de la Comunidad Valenciana).
Muchos turistas también en Madrid y Barcelona donde una noche de hotel cuesta entre 169 y 189 euros.
Pero el principal problema de esta subida de precios en nuestro país lo padecemos, precisamente, los españoles que somos los que más tenemos que recortar las vacaciones en días para que no se resienta nuestra economía porque por parte del turismo extranjero, las nuevas tarifas siguen siendo bastante asequibles y lo vemos, por ejemplo, en el precio de la cerveza que cuesta unos 4 euros en zonas de costa mientras que en Francia, Reino Unido o Noruega sale por más del doble.
“El turista internacional lo tiene muy claro y como tiene que coger también los vuelos, reserva con tiempo y se beneficia de mejores condiciones”, ha detallado Fuster.
Y a pesar de esa subida de precios, el presidente de Hosbec detalla que el sector tampoco sale tan beneficiado ya que los costes se han incrementado también en gran medida: “El mercado nos va aceptando esas subidas de precio pero no conseguimos recuperar la rentabilidad que tuvimos sobre todo antes de la guerra de Ucrania”.