Muchas personas, sobre todo mayores, toman regularmente algún medicamento del que recuerdan perfectamente el envase, no tanto así como el nombre de las pastillas, y es por eso que el color del envase es lo que utilizan para reconocerlo, pero debido a que varios laboratorios han unificado el diseño de todas sus medicaciones, una mujer de 77 años confundió su pastilla de la alergia que toma a diario con un ansiolítico sedante que estuvo ingiriendo durante 5 días.
Y es que, revisando los envases de estos medicamentos, se aprecia que son prácticamente iguales a la vista, y que lo único diferente es el nombre de las pastillas, algo que no siempre recordamos.
Este hecho se ha hecho viral en redes sociales, donde varios usuarios han comparado las cajas de las dos medicaciones de forma alarmante.
Desde el sector farmacéutico explican que es complicado que los laboratorios cambien estos diseños de los envases porque son característicos de cada uno de ellos pero sí que solicitan que haya “una información adicional” que indique para qué se utiliza y que esté “de forma clara y muy visible en el embalaje exterior”.