Los vecinos de la Zona Básica de salud de Andrés Mellado, en Chamberí, están pasando por una situación muy similar a la que vivieron durante la segunda ola, los del Pozo del Tío Raimundo (Puente de Vallecas). Llevan desde el pasado 21 de diciembre bajo cierre perimetral ante la tasa acumulada de contagios que desde entonces hasta ahora ha pasado de los 400 a superar los 800, lo que sitúa a esta área de la capital a la cabeza.
Según explica Marta, una de las vecinas, "no lo llevo demasiado mal, particularmente no ha cambiado mucho la vida, porque yo me muevo por el barrio para comprar y además teletrabajo".
Alerta de que en su opinión, "para la gente joven es como si no hubiera pandemia, esto es lo que está frenando que no bajen los contagios. No le doy otra explicación, la verdad. Los demás estamos haciendo más o menos, lo que hacíamos siempre ser prudente con nuestros convecinos y con nuestras familias".
"Aunque hay estudiantes que se han ido fuera, las terrazas están a tope, como sino hubiera pasado nada. Siempre hay policía, pero nunca he visto que se paren en las terrazas. Creo que están un poco relajados, a mí por ejemplo nunca me han parado", añade.
Esta zona mantiene el cierre perimetral al menos hasta este domingo 28 de febrero, y todo apunta a que si la incidencia de casos no baja, la medida continuará.