Dormir mal unos días puede ser casual. Pero la dificultad para conciliar el sueño durante al menos un mes, tardar en dormirse, despertarse antes, tener desvelos habituales... todo ello son síntomas de estar sufriendo insomnio. La alimentación es una de las claves a la hora de caer en los brazos de Morfeo: almendras, cerezas, atún, nueces, galletas, plátanos, pavo o pollo son alimentos que favorecen el sueño. Por el contrario, fritos, quesos, lechugas, coles, pimientos, té lo dificultan.
El doctor de atención primaria Darío Fernández nos ha dado algunos consejos para conciliar el sueño, que además se pueden consultar en su libro 'Tratamiento integral del insomnio en cuatro semanas'.