Informes emitidos por la Universidad de Berkeley señalan que el sueño diurno mejora el funcionamiento cardíaco y reduce la hipertensión.
El alcohol puede interferir con el descanso a la hora de la siesta. El café, siempre antes de la siesta porque la cafeína tarda media hora en hacer efecto.
Las comidas copiosas inciden en la calidad de la siesta.
Otro consejo importante que no todo el mundo cuida: para dormir una buena siesta se necesita silencio, no una película de fondo.
La cama siempre es mejor que el sofá y con poca luz. Para descansar es suficiente entre 20 y 30 minutos. Nunca se debe superar esa duración.