Los ataques contra jueces con nombres y apellidos por parte de Junts siguen recibiendo contestación no solo de los jueces, también del PP que esta semana lleva al Congreso una moción por la que se someterá a votación la exigencia de que "cesen" los insultos a los jueces.
La intención de los populares es que el PSOE "se retrate" en la cámara baja y condene los recientes ataques a jueces por parte de dirigentes de la formación Junts como Laura Borrás y Miriam Nogueras.
La presidenta de Junts per Catalunya, Laura Borràs, considera que la portavoz de su formación en el Congreso, Míriam Nogueras, "se quedó corta" cuando esta semana citó a varios jueces que, en su opinión, son "indecentes" y deberían ser cesados porque, asegura, "por desgracia, la lista es muy, muy larga".
El pasado martes, Nogueras realizó en el Congreso una serie de acusaciones contra jueces del Supremo, citando a Manuel Marchena, Pablo Llarena y Carmen Lamela, aunque también al expresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) Carlos Lesmes o a la magistrada del Tribunal Constitucional Concepción Espejel.
En concreto, cargó contra una "justicia politizada" y consideró que en un país normalizado democráticamente estas personas "indecentes", en relación a esos jueces, "serían cesadas y juzgadas".
Las acusaciones de Nogueras causaron un terremoto en la cúpula judicial y en la mayoría de asociaciones de jueces y fiscales, que las calificaron de "inadmisibles" y un ataque a su independencia y a la separación de poderes.
En una entrevista en el diario Ara, Borràs ha ratificado las palabras de Nogueras al indicar: "Les preocupa mucho que digamos nombres de determinados jueces cuando lo hizo nuestra portavoz, que se quedó corta, porque por desgracia, la lista es muy, muy larga".
Borràs ha asegurado también que el 'lawfare', o acoso judicial, "se utiliza en España para combatir el independentismo", algo que "ha pasado y está pasando".