Los juguetes para los niños en Navidad: la importancia de "sentarnos a jugar y mirarnos a la cara"

"Los niños tiene que jugar mucho" porque es parte de su desarrollo, Javier Blumenfeld, pediatra del Hospital Universitario de Móstoles nos aconseja en 'Buenos Días, Madrid' sobre cómo elegir los mejores regalos para los niños esta Navidad

Blumenfeld pide "una vuelta a los juguetes más tradicionales" porque "nos estamos yendo hacia un tipo de juguete que estimula demasiado" al niño. "Estamos viendo en las consultas que a los niños les cuesta más fabricar sus propios juegos y jugar con juegos sencillos", explica el pediatra.

Destaca, Blumenfeld, frente a juguetes más 'modernos', las ventajas de los juegos de mesa que "permiten el contacto intergeneracional, con otros miembros de la familia y con otros niños". Son juegos que "generan mucho aprendizaje y además son mucho mas baratos

Señala Blumenfeld, que "hay un exceso de ruidos y colores en los juguetes" que se fabrican actualmente y que, con tanto estímulo "les estamos quitando a los niños la posibilidad de fabricar ellos el juego, les quitamos la posibilidad de aburrirse".

Otra consecuencia de que los juguetes sean "demasiado estimulantes" es que "pueden llevar a los niños a pensar que luego la vida es así de estimulante y la vida es genial pero no es así de estimulante"

Blumenfeld, plantea volver a los juegos de toda la vida como el parchís, la oca o la pelota y lamenta que "se están perdiendo tanto los juegos de calle como los juegos de mesa". Lanza un mensaje a los padres y les pide "que bajen el nivel y vuelvan a los juegos tradicionales porque aportan mas".

Blumenfeld, señala las consecuencias negativas de "una sobreestimulación de pantallas" y explica que "pueden afectar a cosas tan importantes como la atención", dice que ya estamos viendo que la "capacidad de concentración es cada vez menor y somos menos capaces de profundizar en las cosas".

"No pasa nada si regalas a un niño una baraja de cartas o un tablero de ajedrez"

"Los juegos nos permiten socializar", señala y pide la vuelta a juegos donde podamos sentar en una mesa y "nos podamos mirar a la cara". "Hemos perdido la capacidad de generar montones de juegos con algo tan sencillo como una baraja de cartas". "No pasa nada si regalas a un niño una baraja de cartas o un tablero de ajedrez", señala.

Los juegos actuales no favorecen la socialización dice, "ahora mismo hay veces que hay muchos niños juntos pero cada uno mirando una pantalla".

Blumenfeld, también aboga por una vuelta a jugar "en la calle" porque "hemos perdido la costumbre y la calle es más real que jugar en una pantalla, nuestros niños están tan metidos en las pantallas que a veces no distinguen la realidad de lo digital y las relaciones en pantalla son diferentes a las reales".

Por todo esto, Blumenfeld, pide que "volvamos a sentarnos a la mesa jugar a juegos de mesa y mirarnos a la cara".